El Sindicato Único Portuario y Ramas Afines (Supra) lleva a cabo un paro de 48 horas que comenzó ayer por la noche y se extenderá hasta las 23 del sábado, debido al conflicto en torno a las negociaciones de los Consejos de Salarios que actualmente tienen lugar en Uruguay.
Los trabajadores portuarios paran por 48 horas
Es en reclamo por el conflicto en el marco de las negociaciones de los Consejos de Salarios. El sindicato de TCP también adhiere a la medida de fuerza.
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El sindicato portuario de Uruguay realiza un paro de 48 horas.
La medida de fuerza del sindicato de los trabajadores portuarios es de carácter “general y nacional”, y encuentra motivo en los inconvenientes presentados en las negociaciones por un nuevo convenio colectivo en la 10° Ronda del Consejo de Salarios que encabeza el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS).
Al paro de 48 horas anunciado ayer por la tarde —que entró en vigencia desde las 23— se suma también un paro de 24 horas por parte del Sindicato de Base de Navíos, el cual se mantendrá hasta las 14 de hoy.
Supra también resolvió que el Sindicato de Base de la Terminal Cuenca del Plata (TCP) realice un paro de 48 horas, igualmente desde ayer hasta el sábado.
Mientras tanto, el secretariado ejecutivo del gremio se reunirá el próximo lunes 18 para “continuar analizando la situación” y definir cuáles serán las próximas medidas que tomará.
La conflictividad laboral, en aumento
La conflictividad laboral fue uno de los ejes que marcó el mercado de trabajo durante el primer semestre del año, según el Boletín Económico de la Cámara de Comercio y Servicios del Uruguay (CCSUy), al punto de duplicar el promedio total del año pasado.
Al respecto, y a partir del Índice de Conflictividad Laboral Global (ICLG) elaborado por el Departamento de Psicología Social y Trabajo de la Universidad Católica del Uruguay (UCU), se observó un importante aumento de las problemáticas en el ámbito de trabajo. Este índice relaciona los días y horas de trabajo perdidos por conflictos con los días y horas de trabajo que normalmente se habrían podido trabajar. Asimismo, incluye los conflictos sectoriales de rama y de empresa, y los paros generales.
De esta forma, el ICLG correspondiente al primer semestre del año fue más del doble del promedio del 2022, y casi diez veces mayor que el promedio del 2020, el primer año del actual gobierno —si bien hay que tener en cuenta que fue el año más marcado por la crisis sanitaria por la pandemia de Covid-19. Según la CCSUy, la conflictividad laboral es una tendencia marcada de los últimos meses.
El aumento del índice se debió mayormente a los paros generales convocados por el PIT-CNT, que en lo que va del año ya fueron cuatro: dos paros parciales y dos nacionales de 24 horas; un número alto en comparación con lo sucedido en primeros semestres de años anteriores —principalmente por cuestiones coyunturales tales como el 50° aniversario del último golpe de Estado y las medidas en rechazo a la reforma de la seguridad social que finalmente se aprobó en el Parlamento.
Tal y como señala el informe de la CCSUy, entre el 1 de enero y el 30 de junio, se registraron 60 conflictos con interrupción de actividades —incluidos los cuatro paros generales del PIT-CNT—, por los que se perdieron 1.063.914 jornadas laborales. En estas medidas se involucraron 1.198.385 trabajadores.
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