Marina Mercante: más presión al Gobierno para alcanzar una solución

El Ministerio de Transporte recibió a empresarios navieros, que piden medidas urgentes para evitar más fuga de barcos y deterioro en el sector. Los sindicatos también se hacen escuchar.

Encuentro. En el Ministerio de Transporte se realizaron reuniones con los diversos sectores involucrados. La última fue con miembros de las cámaras empresariales del sector.

Funcionarios nacionales, sindicalistas y empresarios de la Marina Mercante comenzaron a delinear las demoradas medidas para rescatar al sector del transporte fluvial de la gravísima crisis que atraviesa, con fuga de barcos a otros países y una flota activa con apenas un puñado de embarcaciones de bandera.

Luego que la CGT y CATT pusieron en alerta al Gobierno, el ministro de Transporte, Alexis Guerrera, activó varias mesas de trabajo para escuchar propuestas y definir acciones. La próxima semana se espera que le lleve un abanico de alternativas al presidente Alberto Fernández, para luego tomar una solución urgente, que podría ser por DNU. Como anticipó Ámbito, el ministro tiene las intenciones de dictar las normas, reglamentaciones, resoluciones y disposiciones para volver a fijar a la Marina Mercante como una “prioridad” para el Estado nacional.

El último encuentro organizado por Transporte reunió a miembros de la Federación de Empresas Navieras Argentinas, la Cámara Naviera Argentina, la Cámara de Armadores de Bandera Argentina y empresarios de las firmas Grupo Servicios Marítimos, CMSA SRL y Atria Logística.

El objetivo de las mesas de trabajo es impulsar medidas que beneficien a la industria, potenciando la defensa de los intereses nacionales, señalaron las fuentes oficiales. Los empresarios celebraron el llamado al diálogo y plantearon la necesidad de buscar soluciones lo antes posible.

Una de las ideas es fijar un porcentaje progresivo de reserva de carga para buques de bandera nacional. Se empezaría con un mínimo de 5% de carga obligatoria. Hoy, solo por el régimen laboral vigente los navíos argentinos son 50% más caros que los paraguayos o los panameños, a lo que se agrega el IVA a los combustibles y otros tributos al patrimonio, mientras que en Paraguay se abona hasta un 9% por todo concepto.

Por ese motivo, otra medida que se analiza sería el otorgamiento de beneficios impositivos similares a los que se brindan en la actividad minera. Así, las embarcaciones argentinas obtendrían una reducción de costos con la rebaja del IVA, Ingresos Brutos y el Impuesto al Cheque, por ejemplo. En el sector insisten que el costo de traslado fluvial de mercaderías aquí es más del doble que en otros países.

Otro aspecto que se podría tener en cuenta es el lanzamiento de nuevas líneas de crédito subsidiadas (hipotecas navales) para la compra de nuevas embarcaciones o refacción de las existentes. Además, se buscaría repatriar a los buques “fugados”, pero con la condición de que el beneficiario final de la reserva de carga sea una firma de capitales nacionales, y no una sociedad anónima local creada por extranjeros, que luego envían sus ganancias a las casas matrices.

Al principio de la semana el ministro Guerrera escuchó a los gremialistas, quienes le dieron una radiografía de la crisis y también le solicitaron medidas urgentes. Sin embargo, con el pasar de los días el Sindicato Conductores Navales de la República Argentina (Siconara), liderado por Armando Alessi, lanzó ayer una huelga por 48 horas en la operación de los buques dedicados a la extracción y transporte de arena cuya capacidad de carga supera los 1.500m³. Piden una recategorización y que las dotaciones “de explotación” se ajusten a la operatoria de estos buques.

El Siconara, que agrupa a los conductores y motoristas de buques gaseros, quimiqueros, petroleros, remolcadores, pesqueros, lanchas de prácticos, areneros y de pasajeros, lanzó la medida de fuerza con el apoyo del SOMU, la Asociación de Capitanes y Baqueanos, el Centro de Jefes y Oficiales Maquinistas Navales y el Centro de Patrones y Oficiales Fluviales. Todos están en alerta por lo que ocurre en la Marina Mercante.

Al mismo tiempo, el titular del Sindicato de Dragado y Balizamiento y el N° 2 de la CATT, Juan Carlos Schmid, recordó que la caída en desgracia del Presupuesto 2022 pone en dudas la ejecución de obras para mejorar la infraestructura portuaria y marítima, incluida la licitación del Canal Magdalena. “No puede haber ni retrasos ni justificativos para encarar concretamente las medidas que hagan efectiva su licitación”, aseguró, y también exigió que el sistema troncal de Santa Fe al Norte sea ejecutado por una empresa nacional, para volver a acumular el conocimiento específico y dotar de vida a los distritos de Rosario, Paraná y Corrientes. “Urge una definición del Gobierno al respecto”, reclamó el sindicalista portuario. No es el único que lo pide.