8 de noviembre 2012 - 00:00

Apagones provocaron caos y malhumor en toda la Ciudad

Puerto Madero colapsó ayer por la falta de luz que dejó sin semáforos a toda la zona. Hubo caos de tránsito.
Puerto Madero colapsó ayer por la falta de luz que dejó sin semáforos a toda la zona. Hubo caos de tránsito.
Tres días consecutivos de altas temperaturas (tanto máximas como mínimas) provocaron cortes de luz en toda la Ciudad. Voceros de las dos distribuidoras que atienden la Capital y el Gran Buenos Aires, Edenor y Edesur, admitieron que tenían cortes, pero aseguraron que eran «puntuales» y que afectaban a un número limitado de clientes.

Sin embargo, cerca de las 18.30 el panorama cambió de manera dramática: todo el microcentro, desde la Casa de Gobierno hasta la zona de Congreso, se quedó sin electricidad. El corte afectó también a las seis líneas de subterráneos y provocó caos en el tránsito por el apagón casi total del sistema de semáforos.

Sucedió que dos líneas de alta tensión de Edesur, que corren entre Bosques (La Plata) y Costanera, salieron de servicio y provocaron el apagón que afectó a 450.000 clientes. El servicio se restableció cerca de las 20, sin que hasta ayer la empresa pudiera explicar las causas. «No fue por el consumo», dijo Alejandra Martínez, vocera de la empresa.

Dado que la interrupción del servicio se produjo en pleno horario pico del regreso de los trabajadores a sus hogares, circular por Buenos Aires en auto o tratar de abordar un servicio público de transporte se convirtió en una tortura.

La demanda ayer alcanzó un pico de 19.377 megawatts justamente a las 18, minutos antes del corte que afectó al servicio de Edesur. Si bien el consumo fue altísimo, quedó lejos del récord de 21.949 mw que se registró el 16 de febrero de este mismo año. Martínez informó: «Tuvimos un récord de consumo de 3.560 megawatts, superior a la demanda máxima del invierno».

Por su parte, Martín Ancarola, portavoz de Edenor, reveló que no se había superado el récord invernal de 4.453 mw, pero que la demanda de ayer se acercó bastante: «Tuvimos un pico de unos 4.100 megawatts; creemos que el sistema respondió bien porque hubo interrupciones puntuales, de no más de 1.000 clientes por corte, que se fueron solucionando rápidamente».

Desde ya, lo que dicen los voceros de las eléctricas no sirve para conformar a los que padecieron los cortes en uno de los días más calurosos del año: para cada uno de esos usuarios el problema equivalió a una interrupción del 100% del servicio.

¿Qué fue lo que provocó esos cortes? La demanda arranca baja a la mañana, va subiendo y tiene su primer pico cerca de las 16.30; a partir de ese momento comienza a bajar, pero a las 19.30, cuando la mayoría de la población llega a su casa y prende los aparatos de aire acondicionado, se produce el segundo pico diario. Lo que está sucediendo es que los cables que transportan la energía no llegan a enfriarse y se queman porque al no bajar la temperatura ambiente los usuarios no apagan los aparatos de mayor consumo.

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