Crítica a Massa: objetó el “rejunte para ganar”

Cristina de Kirchner hizo, ayer, el primer "speach" anti-Sergio Massa. Desde Paraná, la Presidente cuestionó los "rejuntes" en la oposición para "ganar una elección" y remarcó que "cuando uno es legislador acompaña un proyecto de país".

"Cuando uno es legislador, senador o diputado, acompaña un proyecto de país y no es simplemente un rejunte de gente para ganar una elección. La elección es un día, pero se gobierna 365 días del año", dijo la mandataria en lo que se leyó como una crítica al intendente de Tigre, apartado del kirchnerismo y convertido en rival bonaerense, aunque también el cuestionamiento vale para el colectivo porteño que comparten Elisa Carrió y Rodolfo Terragno, entre otros, en un esquema de primarias.

Fue su primera referencia electoral luego del cierre de listas. Ya en tono de campaña, dijo que "necesitamos hombres y mujeres en nuestras cámaras que comprendan las dificultades de un mundo más complejo y hostil".

Al mismo tiempo reclamó no seguir "la música y la partitura que ponen las corporaciones de los medios hegemónicos", sino acompañar "la batuta del pueblo, que nunca se equivoca", y pidió "que cada uno de los argentinos se acuerde de cómo estábamos antes de 2003".

"Vemos las cosas que pasan más cerca con nuestros amigos en un escenario mundial difícil. Entonces es necesario ejercer respetuosamente las responsabilidades institucionales, no a la bartola, no siguiendo la música y la partitura que ponen las corporaciones de los medios hegemónicos, sino siguiendo la batuta del pueblo que nunca se equivoca", subrayó en alusión a la crisis en Brasil.

La mandataria también volvió a aludir a la sucesión presidencial y reiteró su concepto de "empoderar al pueblo" para que "no dependa de un liderazgo" y remarcó que en los últimos años recibió "mucho más de lo que podía aspirar o soñar" para su vida.

Cristina de Kirchner se mostró con el gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri, uno de los dirigentes del dispositivo K que aparecen en la grilla de posibles herederos para 2015.

"Tuvimos algunas bajas importantes, irreparables y tal vez irreemplazables en términos de liderazgo", dijo en referencia a su esposo, Néstor Kirchner, y agregó: "Siempre digo que hay que empoderar al pueblo, a las sociedades, de cada una de las conquistas y los logros, para que no dependan de un liderazgo, que siempre al estar encarnado en un hombre o en una mujer de carne y hueso tiene la finitud que tiene la vida humana".

El tramo final remitió a la discusión en torno a una eventual reforma constitucional para conseguir un tercer mandato. Mañana, la Presidente participará de una actividad en el hospital Churruca.