De la Rúa celebró el golpe final a relato del arrepentido

Mario Pontaquarto

El veredicto en el juicio por los presuntos sobornos en el Senado disparó todo tipo de declaraciones y reacciones entre los imputados apenas los jueces se retiraron de la sala de audiencias.

Fernando de la Rúa sostuvo que "este juicio, que duró dos años y tuvo más de 300 testimonios, demostró la inexistencia de toda sospecha de corrupción para mi Gobierno y puso en claro la verdad". En las puertas de los tribunales de Comodoro Py, De la Rúa señaló que "todo fue una infamia del principio al final" y resaltó que el pago de sobornos a senadores para aprobar la ley de reforma laboral "no existió. Luego concluyó: "Fue el punto de partida de un complot político. La absolución reivindica mi dignidad".

Luego de estas declaraciones el expresidente optó por no hacer más comentarios y agradeció a sus dos abogados defensores, Valeria Corbacho y Jorge Kirzsembaun.

Por su parte, los letrados del exjefe de la SIDE Fernando de Santibañes -Diego Pirota y Gabriel Presa-, aseguraron que la causa fue "una monumental mentira armada y así lo sostuvieron los jueces del tribunal, que llamaron embaucador y mentiroso a (Mario) Pontaquarto y denunciaron al juez (Daniel) Rafecas", dijeron en un comunicado.

En ese sentido, expusieron que los magistrados del Tribunal Oral Federal 3 "en sus fundamentos hicieron saber que todo esto fue armado por Alberto Fernández, Aníbal Ibarra y Daniel Bravo, con la complicidad necesaria del juez Rafecas; y por todo esto incluso los denunciaron penalmente".

Estos letrados a lo largo del debate fueron quienes más hicieron hincapié en la tesis de la supuesta conspiración orquestada desde los organismos de inteligencia.

Colérico

"Se descubrió que Pontaquarto nunca fue a la SIDE y que, por ende, nunca retiró dinero del organismo", señalaron sobre el arrepentido, quien en su relato dijo que retiró de ese organismo 5 millones de pesos para sobornar a senadores del PJ y así lograr que votaran a favor de la ley de reforma laboral.

En una postura antagónica, Pontaquarto se manifestó colérico respecto de la resolución del tribunal.

El arrepentido consideró "vergonzoso" el fallo de los jueces Guillermo Gordo, Miguel Pons y Fernando Ramírez. En sus palabras finales había resaltado que estaban ante la posibilidad de "hacer historia".

"Sentí que fue un fallo vergonzoso, se le hizo mucho mal a la Justicia, que tenía la oportunidad histórica de esclarecer un delito de corrupción", sostuvo el exsecretario administrativo de la Cámara alta luego de escuchar un veredicto que además complicó a su abogado Hugo Wortman Jofré.

Pontaquarto explicó que aún no pudo leer los fundamentos del tribunal, por lo que dijo no saber "si hablan de complot, si hablan de que hubo falta de pruebas o qué. Luego agregó: "Yo soy parte de la verdad de lo que pasó, conté la historia hasta el cansancio durante diez años, pidiendo justicia", expresó visiblemente afectado minutos después de casi protagonizar una pelea con el exsenador Augusto Alasino.

"Yo debería haber tenido una condena porque declaré y me autoincriminé en un delito de corrupción. Lo hice y lo sostuve durante 10 años, nunca bajé los brazos", explicó Pontaquarto al igual que lo había hecho cuando pronunció sus palabras finales en medio de anécdotas y relatos referidos al hipódromo y la tribuna de River.