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Dream Team de Casación, hoy a la Corte por la reforma penal
• Cumbre en el cuarto piso con hombre de Lorenzetti.
• Siguen dudas entre ministros.
• Gobierno, atento.
El cónclave será liderado por Alfredo Kraut, secretario general y de Gestión de la Corte, y participarán el titular de la Casación, Gustavo Hornos, y los camaristas Alejandro Slokar, Ángela Ledesma, Juan Carlos Gemignani, Luis María Cabral y Pedro David. Los asistentes fueron definidos desde la Corte. La camarista Ana María Figueroa, que no figuró entre los convocados inicialmente, llamó al tribunal para manifestar sus quejas y recibió una invitación a sumarse a la reunión.
Tampoco figuró en esa nómina de invitados la camarista Liliana Catucci, quien desde hace tres semanas ha comenzado a recolectar adhesiones en el primer piso de los tribunales de Retiro para presidir la Casación en 2014. Una señal para tener en cuenta.
La clave del encuentro de hoy radica en el hecho de que lo que allí se converse será determinante para el criterio que se utilizará en el momento de integrar las otras dos comisiones que deben trabajar en los papers de la reforma, una integrada por jueces de tribunales orales federales y otra por magistrados de la Cámara del Crimen. Se espera que estos jueces sean convocados a la Corte para mañana. Allí la idea es que en menos de 10 días estén listas las comisiones. Kraut fue el funcionario que firmó la acordada para impulsar los planes de reforma y es un hombre de estrecha confianza para Ricardo Lorenzetti.
Hornos llegará al cuarto piso con una idea que suele manifestar entre sus pares: lograr una Casación más moderna y efectiva. Instancia encargada de revisar las sentencias de los juicios orales, el camarista se muestra a favor de que sus procesos tengan una mayor oralidad mediante la organización de audiencias que tendrían un doble objetivo: una mayor celeridad para resolver una estrategia de otorgar más visibilidad a los jueces y sus decisiones. Conceptos en sintonía con las políticas de Estado que Lorenzetti ha plasmado en la Corte.
Habrá otras dos opiniones a tener en cuenta en la Corte. Por un lado la de Ledesma, quien ya se ha puesto al frente de proyectos de reforma penal que tienden a darle más protagonismo al Ministerio Público, y por el otro la de Cabral, quien desde la Asociación de Magistrados que preside también ha elaborado proyectos de reforma. Estos dos jueces ya tienen la experiencia de haber participado en encuentros en la Cámara de Diputados.
La convocatoria de la Corte en la Casación es amplia en cuanto a lo ideológico: desde críticos del oficialismo como Cabral hasta un integrante de la corriente Justicia Legítima como Slokar, pasando por moderados como Hornos.
Ayer Elena Highton de Nolasco participó de una cumbre con jueces de distintos países y en el momento de exponer se pronunció a favor de que los jueces, además de trabajar para dictar sentencias, desarrollen proyectos para el poder que ellos integran en el sistema republicano. "Los jueces no deberíamos ser sólo una máquina de emitir sentencias", alegó.
Esperable de parte de quien redactó, junto con Lorenzetti, el proyecto de reforma del Código Civil y Comercial.
Esta idea es contraria a lo que entiende Carmen Argibay, para quien las reformas de este tipo deben ser impulsadas desde los gobiernos.
Detalles que adelantan que el proyecto de reforma penal no sólo deberá tener en cuenta los avatares legislativos, sino también las críticas que puedan aparecer en la Corte ya que no todos los que firmaron la acordada del martes pasado piensan en acuerdo con el texto acordado.
El encuentro de mañanacon los jueces de la Cámara del Crimen promete diálogos imperdibles, especialmente porque esa instancia es presidida por María Laura Garrigós de Rébori, quien actualmente dirige Justicia Legítima, entidad que ya tiene entre sus antecedentes marchas frente al Palacio de Tribunales para protestar por resoluciones de la Corte.
Garrigós de Rébori supo tener una estrecha relación con la ministra Argibay, pero los últimos acontecimientos de la política judicial del Gobierno las dividieron.
Cuando la camarista defendió su ascenso a la Casación ordinaria en el Senado, semanas atrás, sostuvo que los fallos de Argibay le parecían "conservadores".
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