Saltó la banca en Indec con el último dato de inflación

Van 32 meses que se redondea hacia abajo. Probabilidad de que ello ocurra: una en 4.300 millones

Facsímil del informe de Goldman Sachs sobre el reporte del INDEC de la inflación minorista de mayo. Marca las curiosidades de las mediciones.

El INDEC se está transformando en una fuente inagotable de curiosidades. Lo primero que llamó la atención del último informe sobre el comportamiento de los precios en mayo es que por 14a vez consecutiva, el costo de vida mensual es un 0,7% o bien el 0,8%. No se mueve de esos dos porcentajes desde hace abril de 2010. Lo que lo hace más improbable al hecho -lo menciona un informe de Goldman Sachs- es que se trata del Índice de Precios Minoristas y no de lo que se denomina en la jerga «inflación núcleo» que no considera en su cómputo a los sectores o productos que tienen alta volatilidad. Si las 14 repeticiones del 0,7% o del 0,8% se hubieran dado en la «inflación núcleo» hubiera sido más entendible. O creíble. Además se está en niveles elevados de inflación, aun tomando como ciertos los datos informados por el INDEC. Es más probable que se repitan mediciones, pero en el orden del 0,3% o el 0,4%. La volatilidad aumenta con la suba de las variaciones porcentuales.

Pero hay otro hecho que rompe con todas las probabilidades. Salta la banca con este fenómeno en cuestión, tal como hiciera Joseph Jagger, el ingeniero inglés que pasó a la historia por haber amasado una fortuna en el casino de Beauxs-Arts en Montecarlo. Simplemente lo que hizo Jagger fue contratar a seis personas para que tomaran nota de los números que salían en las seis ruletas del casino. Así llegó a la conclusión de que una de las ruletas tenía un desvío (los números 7, 8, 9, 17, 18, 19, 22, 28 y 29 salían con más frecuencia que el resto). En tres días amasó una fortuna. Devolvió una pequeña parte cuando el casino empezó a rotar discos y ruletas.

En el caso puntual de las estadísticas argentinas, llamó la atención de los analistas, los «desvíos» en la forma en que el INDEC redondea las cifras mensuales del Índice de Precios al Consumidor. Siempre se da a conocer el número con un decimal, para lo cual, cuando los centesimales están entre «0» y «4» dejan sin cambios al decimal. Pero si los centesimales están entre «5» y «9» agregan una décima. Ejemplo: si el índice es del 0,74% se informa un 0,7% y si es del 0,78% se informa el 0,8%. ¿Dónde está la anomalía? Una consultora de la plaza -en informe anónimo para evitar ser una nueva víctima de las multas por

$ 500.000 de Guillermo Moreno- detectó que desde septiembre de 2008 nunca se redondeó hacia arriba. La lógica indica que a lo largo de los meses los centesimales se vayan repartiendo entre 0 y 9. Pero siempre estuvieron entre 0 y 4. Es más: desde enero de 2010 siempre el centesimal tomó el valor de «3» o «4», los que redondean hacia abajo. La consultora en cuestión fue más allá y calculó la probabilidad de que en 32 registros mensuales (desde septiembre de 2008) el centesimal se ubique siempre entre 0 y 4 (y no redondee hacia arriba): ese evento ocurre en una en 4.300 millones (surge de 0,5 elevado a la potencia 32). Con esta información disponible, sería muy fácil, mucho más para Joseph Jagger, pariente lejano del Mick, acertar cuál va a ser el dato de inflación de junio que el INDEC dará a conocer el 14 de julio. Hay previsibilidad en el organismo nacional de estadísticas. Pero de la mala.