Aun cuando el campo transcurrió su año más combativo contra el Gobierno y cuando se anunciaba el corte de la comercialización de granos durante semanas enteras, las cerealeras y aceiteras lideraron en 2008 el ranking de los mayores exportadores del país. Cargill se ubicó a la cabeza de la lista con u$s 5.671,7 millones vendidos al exterior, el doble de lo que exportaba hace dos años. La siguieron otros gigantes vinculados al sector rural y la agroindustria: Bunge, Louis Dreyfus y la Aceitera General Deheza. Más atrás, aunque siempre en los primeros puestos, quedaron las petroleras y automotrices.
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Las exportaciones argentinas cerraron 2008 con un total de u$s 70.021 millones facturado y con su histórica concentración. La mitad de las ventas al exterior la hicieron sólo 20 empresas.
Según los datos que maneja la Aduana, a los que tuvo acceso Ámbito Financiero, ese grupo de los mayores exportadores contabilizó envíos al mundo por u$s 34.870,5 millones, el equivalente al 49,8% del total.
Aunque la concentración es alta, no sorprende que entre las primeras 20 empresas más importantes en el comercio exterior haya 12 vinculadas a la agroindustria. El complejo oleaginoso exportó durante el año pasado u$s 18.392 millones, un cuarto del total de las exportaciones, con un crecimiento anual del 27,7%. El complejo cerealero vendió por u$s 7.661 millones y fue el tercer grupo en importancia que más exportó, con un crecimiento del 46,1%.
En el 5º puesto del ranking de las grandes exportadores se ubica YPF, con u$s 2.030,6 millones. Esta, como el resto de las grandes petroleras en el país, sufrieron en 2008 el impacto de altas retenciones y un precio internacional bajo del crudo.
Así, YPF que históricamente ocupó el segundo o tercer puesto de la lista de las grandes compañías que venden al mundo, el año pasado fue superada por las cerealeras y aceiteras.
Segundo
El complejo petrolero, igualmente, fue el segundo en importancia, ya que exportó en 2008 por u$s 8.674 millones.
En tercer lugar en el año, vendió el complejo automotor, que exportó u$s 7.246 millones. Esto provocó que cuatro de las principales firmas del sector se encuentren en el ranking exportador.
Ocupó el puesto 15º Toyota, que vendió u$s 980,3 millones. Peugeot Citroën ganó el escalón 18º con u$s 840,3 millones exportados, mientras que Volkswagen y Ford con montos similares se ubicaron en los dos últimos puestos del ranking de los 20 mayores exportadores.
Las cuatro compañías juntas (u$s 3.501,2 millones) no llegan a vender al exterior lo que vende Bunge sola (u$s 3.711,1).
En la lista de más de 15.000 empresas que vendieron al mundo durante el año pasado se observa que sólo 5 facturaron por exportaciones más de u$s 2.000 millones; y sólo 14 superaron los u$s 1.000 millones.
Hacia fin del año pasado, todas estas compañías que abrieron canales para comercializar con el mundo comenzaron a sufrir algunos impactos negativos en las operaciones de comercio exterior (además de las altas retenciones impuestas en algunos sectores) cuando el Gobierno, ya con Ricardo Echegaray en la AFIP, fue suspendiendo los reintegros y devoluciones de IVA. Mientras que economistas aseguran que se trata de una forma de financiarse con las empresas, según el funcionario la polémica decisión se debe a que el 70% de las exportaciones se realizan a través de paraísos fiscales.
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