23 de diciembre 2002 - 00:00

Actualidad

El mundo del arte vivió una se-mana agitada donde se concentraron las entregas de premios en el Museo de Bellas Artes, el MAMBA y la Fundación Klemm, además de conferencias, fiestas y vernissages. Los directivos de la Academia de Bellas Artes, Rosa María Ravera y Clorindo Testa invitaron a una comida en el restaurante Rivadavia cuyo lema convocante fue: «Qué año! Cenemos juntos con esperanza». A tono con los tiempos que corren, en ese encuentro que se tornó multitudinario, cada cual pagó lo suyo, dado que dicha institución no destina presupuesto a financiar relaciones públicas.

• También la semana pasada, el presidente de Brasil, Fernando Enrique Cardozo, cumplió con una de sus últimas gestiones y en una ceremonia realizada en el Palacio del Planalto, condecoró a la operadora cultural argentina Frances Reynolds Marinho con la «Orden de Mérito en la Cultura». La distinción se otorgó a la presidenta de la Fundacion Arte Viva, cuyo objetivo es la creación de un corredor cultural entre ambos países, Brasil y Argentina, por su contribución para difundir la cultura brasileña en el mundo.

Luego del arte contemporáneo, que por primera vez esta temporada superó en las subastas neoyorquinas de Sotheby's y Christie's la recaudación de los maestros impresionistas y modernos -con Picasso incluido-, los libros y manuscritos alcanzaron los mayores records. En la casa Christie's pagaron 3 millones de dólares por un manuscrito de Abraham Lincoln, el precio más alto alcanzado por un documento en EE.UU.


Luego, el récord de toda la historia por una carta, 2 millones de dólares, lo logró un ejemplar escrito a máquina firmado por Einstein y dirigido al presidente Roosevelt, donde lo previene sobre el riesgo de realizar poderosas bombas atómicas a través de la fisión nuclear. El rubro de los libros recaudó este año más de 20 millones de dólares y se superaron varios récords, como el del «Ulises» de Joyce, pagado 460.000 dólares, o «Lolita» de Navokov, 273.000. La lista continúa con «Dubliners», también de Joyce (262.500), «On The Road» de Kerouac (185.000), «The Great Gatsby» de Fitzgerald (163.300), entre muchos otras primeras ediciones que superaron los 100.000 dólares.


Otro rubro en alza en el mercado internacional es la platería. La semana pasada la casa Sotheby's batió en París todos los récords durante una subasta en la que recaudó un total de 2,9 millones de dólares y vendió el 85% de los lotes. Dos calentadores en plata del orfebre Antoine-Sébastien Durant, sigloXVIII, se pagaron 887.630 dólares, récord mundial para ese objeto. Luego, una terrine realizada por el mismo platero en la misma época, alcanzó los 643.000 dólares, y una pieza semejante realizada por Pierre Balzac fue comprada por 514.590.


El agregado cultural de la Cancillería Argentina en Madrid, Sergio Baur, cuenta que «el artista Alejandro Corujeira, radicado en esa ciudad acaba de ganar en dos semanas dos premios de suma importancia, el que otorga la Fundación TODISA, con una dotación de euros 60 mil y el de la Diputación de Zamora, que es muy prestigioso. En la actualidad prepara una muestra para el mes de mayo en la galería Marlborough de España». Pero la gran noticia es la exposición retrospectiva del argentino Guillermo Kuitca en el Museo Reina Sofía de Madrid que se inaugura en una fecha clave: el 7 de febrero, coincidiendo con la feria de ARCO.


El agregado cultural de la Cancillería Argentina en Madrid, Sergio Baur, cuenta que «el artista Alejandro Corujeira, radicado en esa ciudad acaba de ganar en dos semanas dos premios de suma importancia, el que otorga la Fundación TODISA, con una dotación de euros 60 mil y el de la Diputación de Zamora, que es muy prestigioso. En la actualidad prepara una muestra para el mes de mayo en la galería Marlborough de España». Pero la gran noticia es la exposición retrospectiva del argentino Guillermo Kuitca en el Museo Reina Sofía de Madrid que se inaugura en una fecha clave: el 7 de febrero, coincidiendo con la feria de ARCO.


Buenos Aires tiene cada vez más galerías de arte y en la calle Paraná, en un local cercano a la sede de Arte BA, la flamante Roart inauguró un nuevo espacio con dibujos de Carlos Alonso. El artista tuvo a su cargo el creativo montaje de la muestra, e instaló los dibujos en ventanas que se recortan sobre una serie de paneles de madera que envuelve las paredes de la galería. El título de la muestra es «Inauguración», pero se trata de una exposición de tono íntimo y casi autobiográfica del dibujante más virtuoso del país. En esta ocasión, Alonso no hace ostentación de su talento, despliega líneas precisas y despojadas para referirse a sus obsesiones: los maestros de la pintura, los amigos, la figura feme-nina y también la locura. Una obra excepcionalmente lírica es el retrato de su maestro que fue Spilimbergo en su lecho de muerte, un doble homenaje, ya evoca la dramática pintura de Picasso, «Casagemas en su ataúd». Luego, sobresale la serie dedicada a los pintores, los retratos de Macció, Roux, Dávila o Bacon o Kokoschka, entre muchos otros.

Desde hace varios años el Museo de Arte Moderno viene impulsando, a través de un programa de muestras de artistas extranjeros y argentinos, la experimentación con los nuevos soportes tecnológicos del arte. El miércoles, con ese objetivo y el patrocinio de la Fundación Telefónica, entregó los Premios MAMbA a las Artes y Nuevas Tecnologías: 5000 pesos para cada una de las categorías. El premio Video Experimental lo ganó Mariano Cohn con «20/12» y hubo menciones para Narcisa Hirsch, Lucas Engel, María Inés Szigety y Sebastián Tolosa; el de Arte digital o Multimedia lo otorgaron a Hernán Marina y las menciones a Agustín Pontura y Cynthia Kampelmacher; el Proyecto Multidisciplinario a Margarita Bali y las menciones a Leonello Zambón y Ladislao Pablo Gyori. Además, se sumó el Premio Asociación Amigos, un viaje a Europa, que ganó Mónica Jacobo (multimedia).

• En el Nivel 0 del MAMBA, Patricio Larrambebere presenta una instalación, ABTE - Agrupación Boletos Tipo Edmondson. Agrupación creada por Larrambebere y Javier Martínez, quienes aseguran que «más allá de las intenciones de recuperación histórica o el trabajo de investigación», acabaron «reuniendo personas muy diversas carácter en torno a un mismo objeto de devoción: el boleto «tipo cartón», que acabó siendo un vehículo para la construcción de una «institución» mucho más compleja.

El MAC-UnaM, el Museo de Arte Contemporáneo de la Universidad Nacional de Misiones que se inauguró este año en la ciudad Posadas, presentaron la semana pasada una exposición con obras de los alumnos de la Facultad de Artes. La selección fue realizada por diversos curadores, quienes entienden que «existe una búsqueda que intenta trasponer los cánones academicistas que tiñen de aburrimiento muchas producciones. Los lenguajes llamados tradicionales son inagotables, ofrecen posibilidades no explotadas, solo hace falta discutirlas, para estimularlas», observa Mirta Rossetti, curadora general de la exhibición.

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