«La llamada» («The Ring», EE.UU., 2002, habl. en inglés). Dir.: G. Verbinski. Int:: N. Watts, M. Henderson, D. Dorfman y otros.
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"La llamada" parte de una idea tan simple como inquietante. Alguien se topa con un videocasete sin etiqueta, se pone a ver qué tiene, mira unas imágenes más o menos experimentales con una mujer misteriosa, luego la cinta llega a su fin, y entonces suena el teléfono. La persona que vio el video atiende y escucha una voz que le dice que morirá en una semana. A los siete días, muere.
La idea apareció por primera vez en una novela de Kogi Suzuki, luego adaptada en un telefilm japonés de 1995, pero difundida internacionalmente a través del film «Ringu» dirigido por Hideo Nakata en 1998. «Ringu» se convirtió en uno de los mayores éxitos del terror de fines de los '90, pero cuando sus derechos fueron comprados para el remake que se estrena ahora en los cines argentinos, el estudio impidió la difusión del film original.
Con la idea de «Ringu», Hollywood podría haber hecho cualquier desastre. Realmente es sorprendente que no hayan distorsionado el asunto del video embrujado en algún clon de la serie «Scream» y «Leyenda urbana». Todo lo contrario, «La llamada» tiene tanto nivel como el film japonés, y más allá de los pros y contras derivados de la occidentalización de la trama, el resultado es algo que todo fan del cine fantástico debe ver. El cambio más evidente y entendible es el énfasis por explicar cosas que en la película de Nakata son herméticas.
Lo bueno es que si por un lado en un comienzo estas explicaciones dan la sensación de querer suavizar el concepto, el director Gore Verbinski las terminó convirtiendo en un apoyo para volver todo más terrible. También le quitó poderes paranormales a uno de los angustiados espectadores del video espectral, corrigiendo el detalle menos convincente del original. Verbinski es un buen director que hasta ahora estaba perdido en entretenimientos taquilleros pero muy livianos como «La Mexicana» y «Un ratoncito dificil de cazar», y esta remake parece haberle servido de desquite para mostrar su talento.
De hecho, algunas de las mejores escenas de «La llamada» son invenciones nuevas, como la brillante secuencia en la que un caballo se desboca a bordo de un ferryboat. Un elemento original y muy destacable de ambos films es el énfasis en la visión femenina y la infiltración de lo sobrenatural en la vida moderna. En este sentido el trabajo de NaomiWatts -la protagonista de «El camino de los sueños» de David Lynch-como la periodista que quiere saber más sobre la leyenda urbana del video es un importante punto a favor. Y gran hallazgo de Verbinski es la elección de Brian Cox como el personaje clave en el misterio que la protagonista debe resolver en menos de siete días.
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