La salud de Locomotora Oliveras y Pablo Alarcón: Cuál es la diferencia entre un síncope y un ACV

Emergencias médicas en ambos casos, el síncope sufrido por Pablo Alarcón y el accidente cerebro vascular que padece Locomotora Oliveras no son lo mismo a pesar de sus similitudes. De hecho, requieren tratamientos distintos y su gravedad difiere en uno y otro diagnóstico.

Pablo Alarcón sufrió un síncope mientras manejaba y Alejandra Locomotora Oliveras un ACV isquémico. Si bien con semejanzas, ambas afecciones difieren. 

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En las últimas horas el actor Pablo Alarcón sufrió un síncope mientras manejaba. Al desvanecerse, impactó contra otros dos vehículos en la vía pública. Su descompensación ocurre mientras la exboxeadora, Alejandra Locomotora Oliveras, permanece internada en la unidad de cuidados intensivos luego de sufrir un accidente cerebro vascular isquémico. Emergencias médicas ambas afecciones no se trata de lo mismo. ¿Cuál es la diferencia entre un ACV y un síncope?

Según la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, un síncope es la pérdida súbita y breve de la consciencia con ausencia de tono postural seguida de recuperación espontánea. Si bien puede clasificarse de diferentes maneras, lo real es que en cualquier caso su origen se debe a una disminución de la perfusión cerebral.

El paciente queda inmóvil y flácido y en general tiene los miembros fríos, el pulso débil y la respiración superficial. A veces se producen breves sacudidas musculares involuntarias, que se asemejan a una convulsión.

Pablo Alarcón sufrió un síncope: una pérdida súbita y breve de la consciencia con ausencia de tono postural.

Cuáles son las diferencias entre un síncope y un ACV

Si bien no siempre ocurre del mismo modo, en algunas ocasiones quien sufre un síncope, la persona puede experimentar síntomas como mareos, visión borrosa, sudoración, náuseas o palidez. La pérdida de conciencia suele ser breve, y la persona se recupera rápidamente. Según trascendió, esto fue lo que sufrió el actor Pablo Alarcón aunque por el momento se desconoce tanto sus causas como si en definitiva tuvo síntomas previos.

En el caso del accidente cerebro vascular las causas son distintas. Un ACV puede ser isquémico o hemorrágico y en cada caso, las consecuencias difieren. Cuando se trata de una accidente isquémico, el más común y el que sufrió Alejandra Locomotora Oliveras, el flujo sanguíneo se ve interrumpido en el cerebro por una obstrucción, según Mediline Plus. Al perder oxígeno, las neuronas comienzan a morir en cuestión de minutos. En ocasiones, el flujo se ve interrumpido por el estrechamiento arterial.

Cuando se trata de una ACV hemorrágico, el cerebro se ve "inundado" por la rotura de un vaso cerebral. En este caso, "el daño puede ser permanente y se pierde la sensibilidad en la mitad del cuerpo, cara" y demás partes, sostuvo el titular del SAME Alberto Crescenti al aire por C5N.

A su vez, Crescenti dio detalles sobre el accidente isquémico transitorio: en este caso se trata de una pequeña obstrucción que se libera. La misma se trata y puede evolucionar en forma satisfactoria.

En el caso del ACV que sufrió Locomotora, el cerebro se inunda por rotura de un vaso cerebral.

El ACV puede ser causa de síncope

Un estudio reciente publicado en BMJ Global Health Journal concluyó en que, en ocasiones el accidente cerebro vascular puede convertirse en causa de síncope. Esto ocurre en aquellos casos en los que los déficits neurológicos son persistentes. La evidencia médica indica que las principales causas del síncope son mediadas por reflejos y el "accidente cerebrovascular rara vez es la verdadera causa del síncope, ya que el cerebro tiene un suministro de sangre muy redundante".

Más allá de las posibles similitudes en uno y otro caso, las afecciones sufridas por Locomotora Oliveras y Pablo Alarcón no son iguales ni tienen la misma gravedad ni tratamientos.