En línea con las últimas declaraciones de Hebe de Bonafini sobre el Papa Francisco, ahora la presidente de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, aseguró que el líder de la Iglesia católica "puede abrir puertas para saber dónde está el resto de los desaparecidos".
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Sin embargo, Carlotto también exhortó al Pontífice a pedir perdón, si es que corresponde, por las presunta colaboración con los militares de la dictadura para secuestrar a dos curas de su compañía jesuita, cuando todavía no era cardenal. "Tenemos confianza, tenemos siempre abiertos los brazos y el corazón para escuchar y si alguien tiene que rendir algo a la historia, corre por cuenta de esa persona", dijo Carlotto en diálogo con radio La Red, a pocas horas de conmemorarse 37 años del golpe militar.
El titular de Abuelas aclaró que el caso de los secuestros de Francisco Jalisc y Orlando Yorio "está mal dicho, mal informado y hasta deformado" y que eso motivó a las Abuelas a "optar por no hablar más".
"Mientras tanto, avanzamos con una realidad (por la llegada de Bergoglio al papado), que nos parece puede abrir puertas para saber dónde están el resto de los nietos que faltan y los 30 mil desaparecidos", agregó.
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