Nación envía 1.000 agentes federales a Córdoba por amenaza de nueva revuelta policial

En diciembre, el Gobierno envió a Córdoba 1.200 efectivos.

El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, anunció que -por instrucción de la presidente Cristina de Kirchner- se decidió el envío de 1.000 agentes de las fuerzas federales "en materia de seguridad preventiva frente a eventuales acciones" por parte de la policía de Córdoba.

"El gobernador (José Manuel) De la Sota ha hecho un requerimiento formal para la actuación por parte de las fuerzas de seguridad federal y en consecuencia se estableció un mecanismo de prevención", dijo Capitanich en rueda de prensa en Casa de Gobierno.

En ese marco, el jefe de Gabinete indicó que el envío de fuerzas federales tiene como objetivo "evitar acciones que impliquen medidas de carácter extorsivo" y remarcó que "es imprescindible hacer valer la autoridad legítimamente constituida en democracia y el orden institucional".

El jefe de la Policía de Córdoba, Julio César Suárez, se mostró "convencido" de que cuatro efectivos separados de la fuerza querían promover un nuevo acuartelamiento, pero aseguró que "la gran mayoría" de los uniformados "se puso a trabajar".

"No puedo volver a pensar que se atente contra los derechos constitucionales de la sociedad. En este sentido, la gran mayoría de los policías ha entendido este mensaje y se puso a trabajar. Quieren revertir cuanto antes la situación y ganar nuevamente la confianza de la gente", afirmó Suárez.

El jefe policial dijo estar "convencido" de que los efectivos separados de la fuerza impulsaban una nueva rebelión, similar a la registrada en diciembre pasado, y advirtió: "no lo vamos a permitir".

En declaraciones radiales, Suárez explicó: "Me comentaron que hay grupos minúsculos de policías que no tienen una vocación de servicio".

"Mienten cuando afirman que van a ser sancionados, que han sido sacados de un lugar para otro, cuando dicen que la comida no es buena. Esto genera un desánimo. Esta situación puse en conocimiento del titular del Tribunal de Conducta Policial", advirtió.

El funcionario se refirió a un "grupito minúsculo y reducido de policías no tiene vocación de servicio" y aseguró que "todo lo que firmó el gobernador (José Manuel de la Sota) lo va a cumplir, no lo va a borrar con el codo".

"Compramos aire acondicionados para los Comandos de Acción Preventiva (CAP), contratamos servicio de limpieza para las base de los CAP, camas, colchones, mesas, utensilios para que puedan comer cómodos y tranquilos. La comida es muy buena. Se licitaron los uniformes. Son 6 o 7 mil uniformes que se licitaron a una empresa para que todos los policías tengan dos mudas al año", añadió.

Además, aseguró que el "Operativo Verano" que desarrolla la Policía provincial es hasta el momento "muy exitoso".

"Tenemos mucha presencia policial. El Gobierno ha cumplido y va a cumplir con lo que pactó el año pasado. Hay dos mil pesos que se les paga a todos los CAP del 1 al 10, las motocicletas, el cuerpo de infantería, toda esta gente recibe un dinero por mantenimiento de uniforme para que podamos trabajar y combatir todos los días el delito", sostuvo el jefe policial.