2 de diciembre 2013 - 00:40

Senado: dictamen a impuesto para bienes de lujo

El proyecto contempla gravar entre un 30 y un 50 por ciento, de acuerdo al valor que tengan, determinados bienes de alto valor.
El proyecto contempla gravar entre un 30 y un 50 por ciento, de acuerdo al valor que tengan, determinados bienes de alto valor.
El oficialismo avanzó en el Senado con el proyecto para aumentar los impuestos internos para autos y motos de alta gama, embarcaciones y aeronaves deportivas y se resignó a postergar la votación para sesiones extraordinarias.

Los senadores oficialistas le dieron dictamen a la iniciativa enviada por el Poder Ejecutivo en el plenario de las comisiones de Presupuesto y Hacienda y de Coparticipación Federal.

Pero para aprobarlo en la sesión prevista para este miércoles, el oficialismo necesitará que le habiliten el tratamiento sobre tablas, lo que requiere del acuerdo de los dos tercios de los presentes, y la oposición condicionó su apoyo a que se realicen modificaciones en la iniciativa.

Durante la reunión, el presidente de la Cámara de Importadores de Automóviles, Arturo Scalisi, pidió que el impuesto se rija por "una escala en donde va subiendo de a 10 puntos para que incluso la marcas intermedias puedan trabajar".

"No estamos discutiendo el impuesto interno, pero nos parece que hay un error. Nosotros estamos pagando el 10%, que se hace el 13 real, y no se ha hecho una escala. Entonces, hasta 170 mil pesos no habrá impuesto, y de 170 a 210 se cobrará un impuesto del 42% real. Esto hace que desparezcamos del mercado", explicó.

Según Scalisi, "con este impuesto, los usuarios de las tres grandes marcas que todos conocen va a seguir comprando, pero todos lo intermedios desaparecen".

El titular de la Cámara Argentina de Fabricantes de Motocicletas, Lino Stefanuto, aseguró que "el que compra una motocicleta, en el 95% de los casos es porque no puede acceder a un auto".

"Imaginemos que una moto de 22 mil pesos paga impuesto, va a costar más de 50 mil pesos. Cuando alguien quiere cambiar una moto que ya tiene algunos años de uso, ya no puede acceder a la misma porque pasó a costar más del doble", agregó.

Además, cuestionó que "en el caso de los autos, se exime (del impuesto) a las camionetas utilitarias" pero "en las motos, que muchas son de trabajo, no hay exención", y remarcó que la parte nacional del mercado emplea a "cuatro mil trabajadores" y "20 mil a través de sus proveedores que producen partes".

Otro de los expositores fue el titular de la Cámara Argentina de Constructores de Embarcaciones, Miguel Mooney, quien remarcó que en este caso "lo único importado son los motores, porque en el país no se fabrican", mientras que "el resto es todo nacional, no se van divisas afuera y se reinvierte".

Mooney pidió "diferenciar los autos importados de la industria náutica argentina", que "ha sido siempre industria pyme" y subrayó que "las embarcaciones de mayor calidad se producen en el país, empleando mano de obra argentina", lo que contempla a "casi 10 mil familias".

El senador del PJ-La Pampa Carlos Verna pidió modificar el proyecto para "actualizar el monto" del impuesto de forma escalonada y algo similar propuso la UCR.

En efecto, el senador radical Ernesto Sanz pidió "adecuar" el impuesto "a una progresividad y escala que proteja a la industria nacional".

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