Acuerdo Mercosur-UE: en setiembre habrá una reunión presencial y crece la expectativa por firmar antes de fin de año

Las conversaciones se retomarían con fuerza tras las elecciones parlamentarias europeas, mientras en la región todavía buscan avanzar rápidamente con China.

El acuerdo Mercosur-UE podría cerrarse antes de fin de año con la reanudación de las negociaciones.

El acuerdo Mercosur-Unión Europea (UE) todavía intenta concretarse definitivamente, con una nueva fecha límite puesta para fines de este año y con algunos intentos diplomáticos por lograr cerrar las negociaciones que llevan más de 20 años, renovados tras las elecciones en el bloque europeo. En ese sentido, los negociadores de ambos organismos multilaterales se reunirán en septiembre en Brasilia, mientras que la reelegida presidenta de la Comisión Europea Ursula von der Leyen viajaría a Río de Janeiro en noviembre.

A pesar de que muchos de los países involucrados ya habían casi echado por tierra cualquier esperanza por lograr cerrar el acuerdo Mercosur-UE —sobre todo, tras el fracaso de las negociaciones en diciembre del año pasado—, todavía siguen habiendo intentos por culminar el tratado de libre comercio entre los bloques. Lo cierto es que los resultados de las elecciones europeas dieron algo más de margen para seguir las conversaciones, mientras que desde Sudamérica, si bien ya miran hacia otros socios globales, todavía no sueltan la línea de diálogo con el Viejo Continente.

Por ello, los negociadores de ambos organismos se reunirán del 4 al 6 de setiembre en Brasilia, por primera vez cara a cara desde abril, lo que aumenta la expectativa de que el acuerdo pueda cerrarse antes de fin de año, tal y como se comprometieron von der Leyen y el presidente de Brasil Luiz Inácio Lula de Silva.

"Viajaremos a Brasilia para una ronda de negociaciones presenciales del 4 al 6 de septiembre", dijo un diplomático europeo a la agencia Reuters. "El calendario de fin de año para la conclusión es realista", afirmó.

Por su parte, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil confirmó las fechas de la reunión, aunque todavía no se conoce públicamente las posturas de las cancillerías de Uruguay y Argentina. De todos modos, la posición de ambos países es cerrar el acuerdo Mercosur-UE para dar fin a una negociación demasiado larga.

Un punto a tener en cuenta es que los temas espinosos sobre la mesa siguen siendo los mismos, incluida la protección europea de los nombres de los productos alimenticios y la oposición brasileña a una ley antideforestación de la UE que entrará en vigor el próximo año y que podría afectar sus exportaciones. Pero el bloque europeo sigue insistiendo en la concreción del tratado, con el objetivo de abrir nuevos mercados para sus empresas.

En tanto, Brasil quiere dar una sensación de continuidad a las negociaciones", según explicó el director del Instituto de Negocios Internacionales de la Universidad Católica del Uruguay (UCU), Ignacio Bartesaghi. El motivo serían los temores de que el presidente argentino, Javier Milei, se retire del acuerdo, aunque su gobierno ha apoyado las conversaciones desde que asumió el cargo.

En este contexto, se espera que el viaje a Río de Janeiro en noviembre de la presidenta de la Comisión Europea en el marco del G20 sirva para resolver cuestiones de última hora con el presidente brasileño.

La mirada puesta en China

En tanto, agosto será un mes clave para las conversaciones Mercosur-China, el objetivo principal de Uruguay en la presidencia pro tempore del bloque. En esa línea, la llegada del vicecanciller chino Ma Zhaoxu a Montevideo será el primer gran paso para dar inicio a las negociaciones con el bloque regional en su conjunto, y ya no únicamente el gobierno de Luis Lacalle Pou.

La primera vez que el presidente propuso el diálogo amplio fue tras regresar de su gira diplomática a Pekín, y a pedido de Xi Jinping, en diciembre del año pasado; y la idea fue bien recibida por el gobierno argentino ante los pocos avances respecto del acuerdo con la Unión Europea (UE). “Vamos a pedir una reunión de los jefes de Estado del Mercosur con el jefe de Estado chino. Si no es así, que los servicios técnicos del Mercosur se reúnan con China, porque no ha habido una reunión hace mucho tiempo. Y es muy importante, China la quiere”, aseguró entonces, con la intención de “ir arrimando el bochín”.

Sin embargo, las distintas coyunturas nacionales, tanto de los países sudamericanos como del gigante asiático demoraron los avances de las conversaciones.

Ahora, con Uruguay ocupando la presidencia pro témpore del bloque, esta línea de negociación será "una de las banderas importantes", tal y como señaló el canciller Omar Paganini. Y agosto podría ser el mes clave para ello.