Creció 11,3% interanual el crédito privado, impulsado por la baja de tasas y los efectos de la sequía

El incremento en los créditos de consumo ante mejores condiciones de interés y el financiamiento al agro por los impactos climáticos mantuvieron dinámico el segmento.

Las menores tasas de interés, así como los efectos climáticos en el agro, impulsaron el crédito persona y empresarial.

El crédito en el sector privado no financiero se mantuvo dinámico durante el segundo trimestre de 2024, y creció un 11,3% en términos interanuales, equivalente a un aumento del 6,7% real. El principal motor de este crecimiento fueron los créditos de consumo, mientras que los créditos a empresas se mantienen en una tendencia bajista en pesos, pero registraron un incremento en dólares de la mano del sector agropecuario.

El Banco Central del Uruguay (BCU) publicó el Informe de Política Monetaria correspondiente al segundo trimestre del año. Allí, entre una amplia serie de datos, la autoridad monetaria también destacó el crecimiento del crédito bancario en pesos, que mantiene una tasa de aumento tendencial en torno al 2,4% real anualizado a junio. Esto significa una suba interanual del 11,3%.

Uno de los principales motivos de este aumento se encuentra en la baja de las tasas de interés que, tal y como señala el BCU en su informe, mantiene una tendencia descendente, en línea con los recortes que se vienen realizando sobre la Tasa de Política Monetaria (TPM), es decir, la referencia para el sector bancario.

Al respecto, cabe recordar que la última reunión del Comité de Política Monetaria (Copom) resolvió mantener las tasas en 8,5%, luego de haber recortado 50 puntos básicos en abril. Mientras que, en lo que respecta a la tasa de crédito al consumo, ésta se subió en torno al 28,6% en junio para los préstamos otorgados con autorización.

Este menor promedio de tasas fue lo que llevó a mejorar las condiciones del crédito y, por lo tanto, a que más personas recurrieran al financiamiento bancario, principalmente a través del crédito de consumo.

La sequía impulsó el crédito a las empresas

El crédito en moneda extranjera, en tanto, creció a una tasa interanual del 12,5% medido en dólares durante el segundo trimestre, destinado prácticamente en su totalidad a empresas. Esto significó una variación mensual anualizada del 8,1% a junio.

En este segmento, el crecimiento se explica, mayormente por el impacto que la sequía histórica tuvo en el sector agropecuario, que no solo generó la necesidad de financiamiento por parte de las empresas del agro, sino también de ofrecer mayores alternativas por parte de los bancos e instituciones financieras. Aquí también incidió un efecto a más corto plazo de las inundaciones y exceso de lluvias que se dio en el comienzo del otoño.

Asimismo, el sector comercial se ubicó en segundo lugar como dinamizador del crédito empresarial en moneda extranjera.

En total y a nivel agregado, el crédito total se ubicó alrededor del 29% del Producto Bruto Interno (PBI), un nivel más alto que el previo a la pandemia; mientras que el grado de pesificación —en un contexto en el que se favorece el desarrollo de los segmentos en pesos— que se mantiene en torno al 52,8% en junio, similar a sus registros máximos.