"Es necesario un pacto educativo", defendió Yamandú Orsi ante la Unesco

Deslizó la idea de separar el Ministerio de Educación del de Cultura e, incluso, de darle rango ministerial a los organismos dedicados a la ciencia y tecnología.

Yamandú Orsi presentóuna serie de medidas en materia educativa que tendría su eventual gobierno.

El candidato presidencial del Frente Amplio (FA), Yamandú Orsi, presentó sus principales definiciones educativas y también dejó mostrar algunas figuras que podrían formar parte de su equipo de gobierno en el área, en una actividad convocada por la oficina de la Unesco en Uruguay y la Organización de Estados Iberoamericano (OEI).

La necesidad de un acuerdo o pacto en el tema fue el planteo central que realizaron tanto el candidato como los asesores que lo acompañaron en el encuentro, el actual senador José Carlos Mahia y el historiador Gabriel Quirici. Incluso Orsi evitó colocar la idea de una “nueva” reforma que pueda sustituir “de raíz” la actual transformación educativa, planteada por el actual gobierno.

“Me preguntan cuál es la reforma que tenemos planeada, no sé si nos hace bien que vengamos con la novedad de la nueva reforma. Los intentos de refundaciones parece que no nos van a ayudar”, aclaró con énfasis Orsi, quien recordó que es docente de historia, por lo tanto, está directamente involucrado en el tema.

En esa línea, el candidato del FA profundizó sobre su idea de pacto educativo: “El diagnóstico que hacemos es que ha habido muchas intenciones y muchas reformas que se concretaron a lo largo de los últimos 40 años de la historia del país en tema educativo, pero muchas veces la forma se come el contenido, no somos capaces de valorar los niveles de acuerdo que podemos tener y nos detenemos bastante más en la diferencia”, expresó.

Orsi puso como ejemplo el Plan Ceibal, creado durante la gestión del Frente Amplio y que fue mantenido durante el gobierno de coalición, para luego hablar de otros temas como la extensión del tiempo pedagógico.

“Vamos a tomar lo que funciona y potenciarlo en la medida que tengamos acuerdos del sistema político, pero también de los movimientos sindicales y las cámaras empresariales, y de la comunidad en su conjunto y ahí tenemos hasta los gobiernos departamentales que pueden hacer sus aportes”, agregó.

Orsi fue más allá y aseguró que “en todas las áreas del país, programáticas, la idea de un acuerdo no tiene una excepción. Hay que tener un acuerdo en todo. Ahora, ¿cuál es la diferencia entre un área y otra? Que algunos temas de carácter nacional no se resuelven o no se encaminan sin acuerdo y deberían ser de largo aliento. Deberíamos promover acuerdos principales”.

A su tiempo actual senador Mahia, que suena como uno de los nombres que podría tener un eventual gobierno del FA en el área de la educación, profundizó sobre el concepto. “Un pacto sobre lo más simple como universalizar la educación por ejemplo y a partir de ahí pensar una estrategia de mediano y largo plazo”.

“Por supuesto que como gobierno que quiere asumir el año próximo, hay que tener políticas concretas para los cinco años”, señaló el legislador y mencionó el aumento de la matrícula universitaria, focalización de esfuerzo institucional en educación inicial y bajar los niveles de ausentismo escolar entre otras.

Mahía puso énfasis en la iniciativa de crear la universidad de la educación a la que definió como “un elemento importante”. “Nosotros estamos convencidos que tenemos que tener el coraje de transitar sin también preconceptos en lo más complejo, porque para crear una universidad tenés que tener materias especiales y para eso tenés que acordar con otros aspectos institucionales, desde la gobernanza hasta el diseño”, dijo.

Por su parte el historiador y docente universitario Gabruel Quirici colocó el tema de crear “espacios formativos” que vayan más allá de las correspondientes horas “de aula”. “Se necesita un ámbito institucional, diseñado y apoyado por diferentes sectores, en donde las y los chiquilines, en la adolescencia, puedan estar en un tiempo adecuado de calidad, no como una referencia, sino como un espacio formativo, para formar cabeza crítica y personas libres”, detalló.

“¿Qué es más importante para los chiquilines que tener acompañamiento en salud mental, en dificultades de aprendizaje, en integración a las cuestiones ambientales, de convivencia? Supondría tener liceos, UTUs, centros comunitarios, donde las docentes, maestros, psicólogos, equipos, profesores de educación física trabajen en relación con el entorno”, explicó.