El ministro de Ambiente, Edgardo Ortuño, enfrenta una extensa interpelación de más de 9 horas en la Cámara de Diputados por la reformulación del proyecto Arazatí, donde la oposición le reprochó dejar sin la seguridad de abastecimiento de agua a 1,8 millones de personas del área metropolitana y de suspender una "obra alternativa" (impulsada por el gobierno anterior) que estaba "pronta para resolverse".
"No dio respuestas concretas", la oposición cargó contra Edgardo Ortuño por la cancelación del proyecto Arazatí
Diputados cuestionaron al jerarca por proponer una nueva obra que podría generar inundaciones en Casupá y Lavalleja.
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"Sin estudios correspondientes ya tomó la decisión de inundar 3.600 hectáreas", la oposición cruzó a Ortuño.
La convocatoria, impulsada por el diputado del Partido Colorado (PC), Walter Cervini, comenzó a las 10:30 y se extendió hasta las 19:50, evidenciando la complejidad y la tensión política en torno a la decisión gubernamental.
Cervini fue contundente en sus críticas: "El gobierno suspende una obra alternativa que era posible y que estaba pronta para resolverse y que en 36 meses Uruguay iba a contar con una solución a los problemas y ahora depende de un solo río que es el Santa Lucía, es decir, puede hacer que le falte el agua a la gente que vive en el área metropolitana (1.800.000 personas). Nos preocupan los impactos sociales, ambientales y económicos que pueda generar la nueva obra".
El diputado del Partido Nacional (PN), Juan Rodríguez, cuestionó la calidad de las respuestas ministeriales: "Hemos presenciado más de 4 horas del ministro que ha hecho una alocución general que ha rozado algunas preguntas de las planteadas y la mayoría ni siquiera se ha referido. El presidente de OSE ha comenzado a responder alguna de esas preguntas repitiendo lo mismo que se dijo en Comisión".
Por su parte, el diputado del PN, Mario Colman, fue más allá y denunció la falta de soluciones concretas: "No le podemos dar seguridad de abastecimiento de agua al área metropolitana porque no se han dado respuestas. No le podemos dar respuesta a la gente de Ciudad del Plata y de Libertad respecto a la solución de tratar de tener una toma que no sea agua con arsénico. No dieron respuestas concretas y se está amputando la posibilidad de tener una toma alternativa al Río de la Plata que le dé seguridad al país ante cualquier situación anormal en la cuenca del Santa Lucía".
El diputado del PN, Sergio Valverde, denunció el impacto ambiental de la nueva propuesta: "El gobierno sin estudios correspondientes ya tomó la decisión de inundar más de 3.600 hectáreas de Casupa y más de 426 hectáreas de monte nativo afectando a 12.000 hectáreas más y hasta 65.000 hectáreas contando a Lavalleja".
La respuesta de Ortuño a la oposición
Pese a las críticas, el ministro Ortuño defendió la reformulación del proyecto y afirmó: "Ratificamos con numerosos argumentos que la decisión adoptada por el gobierno es la mejor para el país y para la población que tendrá asegurado el abastecimiento de agua potable con un ahorro significativo de dinero para el Estado", sostuvo el ministro durante su extensa exposición.
Ortuño también destacó las inversiones previstas: "Estaremos realizando un paquete de obras realmente muy significativo, históricas para lo que es la inversión en agua potable en el país".
El ministro reafirmó además el compromiso con el carácter público del servicio: "Ratificamos y estaremos ratificando el carácter de servicio público del servicio de agua potable y la prestación del servicio por parte de nuestra empresa pública, Administración Nacional de las Obras Sanitarias del Estado (OSE), y estamos con todo ello cumpliendo con un compromiso del programa de gobierno establecido con la ciudadanía".
OSE defiende renegociación
El presidente de OSE, Pablo Ferreri, justificó la decisión de renegociar el proyecto original: "Para poder acometer todos los desafíos que nos estamos planteando con un enfoque sistémico era necesario renegociar el proyecto Arazatí".
"Entre otras cosas, tenía un costo imposible de asumir si se querían hacer otras obras prioritarias, como es generar una reserva de agua bruta dulce en la cuenca de Santa Lucía, que es la que nos va a proteger y permitir pasar eventos de sequía", apuntó Ferreri.
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