Las consecuencias de una de las peores sequías que ha experimentado el Uruguay en los últimos 100 años todavía siguen dando que hablar, sin embargo, las buenas condiciones climáticas y la expectativa de un verano sin exabruptos climáticos generan esperanzas dentro del sector agropecuario sobre su principal cultivo, la soja.
Soja en ascenso: la zafra será la mayor en los últimos 8 años
El sector, clave en las exportaciones, repunta luego de una sequía que traumatizó al sector agropecuario.
-
Se encienden más alarmas con la reducción de la demanda de soja en China
-
El precio de la soja sigue cayendo a nivel global y afecta a Uruguay
Según el último informe de la asociación sin fines de lucro, Urupov – dedicada a investigación, desarrollo, producción y comercialización de nuevas variedades vegetales – la zafra de la soja es la mejor en los últimos ocho años.
Acorde al estudio, el área estimada de siembra de soja para la zafra 2023/24 es de 1.343.415 hectáreas, una superficie que viene en crecimiento desde el año 2021 siendo la primera vez que se supera el nivel de 1.300.000 hectáreas. “Hay potencial agrícola para sembrar porque Uruguay ha superado el área total sembrada de soja en otros años”, aseguró Diego Risso, director ejecutivo de Urupov, en diálogo con Ámbito.
En ese sentido, comentó que el aumento de la siembra de soja se debe a varios factores, aunque depende mucho del rendimiento de los otros cultivos la decisión de los productores de elegir la soja. “La explicación de por qué aumenta la siembra de soja de un año al otro es multifactorial. No depende solo de la soja, sino de la rentabilidad de los otros cultivos. El sorgo bajó mucho en Uruguay este último año y el maíz se mantuvo”, detalló.
Una situación por remontar
La peor seca en los últimos 100 años en el Uruguay todavía deja consecuencias en el sector agropecuario y la soja no es la excepción a la regla.
Acorde al informe de Urupov, el porcentaje de chacras teledetectadas que presentan soja por segundo año consecutivo (un 54%) disminuyó respecto al promedio estimado desde 2019. Esto se debe a posibles chacras perdidas y no identificadas durante la zafra 2022/23, debido a las condiciones de extrema sequía que afectaron el país durante ese verano.
Además de eso, en el sector todavía sigue el fantasma de una posible vuelta de La Niña en el próximo verano. Sin embargo, según los pronósticos del Sistema Nacional de Emergencias (Sinae), se espera que las probabilidades de que se produzca una situación similar a la del período 2019- 2023 es mucho menor y ronda entre el 30 y un 50%.
Para mayor tranquilidad, desde el Ministerio de Ambiente aseguraron que se encuentran más preparados para una posible revancha de la sequía. El director Nacional de Aguas del Ministerio de Ambiente, Luis Anastasía, comentó que conformaron un grupo de trabajo estructural donde se logró definir qué hacer en cada momento de la seca.
“Aun cuando venga una nueva sequía que tenga tres años de duración, estamos en mejores condiciones y más preparados que en la situación que pasamos recientemente”, aseguró.
Dejá tu comentario