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Fajan oficina de Máximo y desatan la ira del FpV
Monzó es la máxima autoridad de la Cámara baja y tiene la potestad administrativa para asignar y reasignar despachos. Sin embargo, desde el bloque del Frente para la Victoria denunciaron que esa oficina del segundo piso del Palacio Legislativo ya estaba a cargo de Máximo, quien, a pesar de que no la ha ocupado aún para trabajar, tenía empleados administrativos y albañiles para pintar las paredes y techos.
Cambiemos quiebra así en Diputados una triple tradición parlamentaria: el segundo piso siempre fue ocupado por legisladores de la UCR y el tercero siempre albergó a los parlamentarios del PJ. Además, de acuerdo con los usos y costumbres del Congreso, el diputado saliente define su "heredero" de las instalaciones que deja vacías.
El despacho de la discordia había sido ocupado en el período 2011-2015 por José María Díaz Bancalari. Este diario publicó el miércoles que esa oficina que quedaba vacía sería el nuevo lugar de trabajo de Máximo. Al día siguiente, el despacho apareció con una faja de clausura colocada por la Dirección de Seguridad de la Cámara que responde, vía Monzó, a la Secretaría General.
La faja fue colocada el miércoles por la noche. Y los diputados del FpV se percataron de la novedad ayer por la mañana. El despacho clausurado está ubicado enfrente de la oficina de Andrés "Cuervo" Larroque, compañero de Máximo en la ultracristinista La Cámpora. Desde esa agrupación sospechan que Monzó tuvo una devolución de gentilezas con el FpV a partir de la denuncia penal que el jefe de bloque, Héctor Recalde, presentó contra el presidente de la Cámara baja. El exabogado de Hugo Moyano denunció a Monzó en la Justicia por "incumplimiento de funcionario público y abuso de autoridad" a partir de la designación del macrista Pablo Tonelli para ocupar una silla en el Consejo de la Magistratura.
Las escaramuzas por el control de los despachos son un clásico de verano en Diputados y se repiten cada vez que hay recambio. Incluso algunos llegan a pernoctar en las oficinas para defender su territorio y evitar que otro colega les gane las instalaciones de mano. Ayer, desde la puerta del despacho, Larroque afirmó a la prensa que el hecho "se inscribe en el gran conjunto de provocaciones que están dando al pueblo argentino y en especial a nuestro sector el Frente para la Victoria".
"El despacho estaba asignado al Frente para la Victoria, a Máximo Kirchner. De repente vemos una faja de clausura en las puertas y nos encontramos a dos personas que seguramente fueron enviadas por la autoridad de la Cámara, que estaban clausurando la oficina", contó luego Recalde. Los diputados del FpV llamaron a un cerrajero y cambiaron la cerradura del ingreso lateral, que da a un pasillo. También presentaron un reclamo administrativo para saber quién dio la orden de ingresar al despacho del hijo de los expresidentes. "Máximo desdramatiza la situación y no es diputado porque le interese un despacho o el otro. Igual consideramos que es un antecedente grave teniendo en cuenta que en la oficina podría haber habido información personal o laboral de importancia", explicó un colaborador de Máximo desde el Congreso.
Monzó apeló a la resolución 40/16 que establece que "la ocupación actual de las oficinas, despachos y demás espacios físicos (...) reviste carácter transitorio hasta tanto se resuelva su asignación". En el artículo segundo indica que "previo a la inauguración del 134° período de sesiones ordinarias, y previa evaluación por parte de la Secretaría General de la Presidencia, se procederá a la distribución y adjudicación de espacios físicos por intermedio de la Secretaría Administrativa".
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