La plaza PRO y el desafío de controlar la calle

Rogelio Frigerio

Ya con el bastón en la mano, el control de la calle emerge como el principal desafío estival de Mauricio Macri. Más con un kirchnerismo amotinado y "en estado de rebeldía". Por eso, intendentes, gremios y gobernadores de Cambiemos convocaron hoy a su tropa para ofrendarle a Macri su primera movilización a Plaza de Mayo.

Si bien el presidente de la Nación es poco afecto a las manifestaciones callejeras, el nuevo gobierno nacional trabajó desde ayer para ultimar detalles del operativo de seguridad para garantizar una manifestación pacífica y sin incidentes. La reunión fue encabezada por la Ministra de Seguridad, Patricia Bullrich y por el Ministro del Interior, Rogelio Frigerio. El esquema es evitar cualquier clase de movilización de aparato político y organizar la Plaza para una concurrencia de tipo familiar y espontánea, pacífica.

Se tratará de una movilización de baja intensidad, sin consignas estruendosas y con un espíritu festivo a partir con la democracia como principal factor de cohesión, según informaron desde Cambiemos. Entre los convocantes aparecen los intendentes de Cambiemos del conurbano con Julio Garro (La Plata), Nicolás Ducoté (Pilar), Néstor Grindetti (Lanús), Diego Valenzuela (Tres de Febrero), Martiniano Molina (Quilmes) y Ramiro Tagliaferro (Morón) a la cabeza. El gobierno de la provincia de Buenos Aires, de María Eugenia Vidal, y la jefatura de gobierno porteña, de Horacio Rodríguez Larreta, también estarán presentes en la Plaza de Mayo.

La convocatoria gremial está a cargo de Hugo Moyano, secretario general de la CGT, y de Gerónimo "Momo" Venegas, el gremialista que activamente jugó en la campaña presidencial de Macri. La designación de Jorge Triaca al frente del Ministerio de Trabajo trajo calma a los sindicatos y el anuncio de Macri de eximir al aguinaldo del impuesto a las ganancias terminó de sellar la paz con el moyanismo. "Desde Pilar vamos a viajar temprano al menos unos 400 vecinos. Calculamos que van a ser al menos 80 autos y 4 o 5 micros. Nos concentramos en la esquina de 9 de Julio y Avenida de Mayo", explicó ayer Ducoté, quien se impuso al peronista sciolista Humberto Zúccaro en Pilar. "Nosotros nos juntamos en la puerta de Bolívar uno con los vecinos de Lanús, vamos a estar presentes acompañado la llegada de Mauricio desde el Congreso", confirmó también Grindetti, intendente PRO que rompió la hegemonía peronista en ese distrito del sur del conurbano.

Más allá de la transición económica, la principal preocupación de Cambiemos es la transición social y el control de la calle. La agrupación MILES de Luis D'Elía, el Movimiento Evita de Emilio Pérsico, Quebracho de Fernando Esteche y hasta La Cámpora de Máximo Kirchner se declararon en estado de movilización permanente y ayer coparon la Plaza de Mayo, apenas un par de horas antes del inicio de la presidencia Macri. Ese ese cóctel se suman los metrodelegados, que ayer paralizaron la Lìnea A de Subtes en reclamo contra despidos, el reclamo de trabajadores de Cresta Roja y hasta los cortes de calle encabezados por veteranos de Malvinas. Todo a cargo de Patricia Bull-rich. A ese diagnóstico social se suman las tomas de tierras en Quilmes y Merlo.

Los intendentes de Cambiemos fijaron una agenda de prioridades para pasar el verano y asumirán con un plan de contingencias en el conurbano: cortes de luz, inundaciones y seguridad. Les preocupa el fenómeno climático de El Niño, que trae aumento de precipitaciones. Sin embargo, la bajas temperaturas que trae asociado este fenómeno le traen, paradójicamente, alivio a otro sector de Cambiemos. El ministro de Energía, Juan José Aranguren, confía en que este verano haya menos colapsos de la red eléctrica, ya que haría menos calor y bajaría el consumo eléctrico de aires acondicionados.