Ricardo Alfonsín desató el fanatismo radical por la figura de su padre en un colmado teatro Gran Rex. Elisa Carrió aprovechó el fervor alfonsinista durante la presentación de los candidatos del Acuerdo Cívico y Social.
Banderas de Alfonsín con la leyenda «Somos los hijos de la democracia», merchandising alfonsinista a la venta dentro del teatro Gran Rex y cánticos que vivaban el nombre del ex presidente radical. La atmósfera en la presentación de candidatos del Acuerdo Cívico y Social estuvo dominada por los homenajes al caudillo radical pero, ante la ausencia de Julio Cobos, fue Elisa Carrió la principal animadora de la fiesta.
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El evento opositor, donde Ricardo Alfonsín hijo fue el más ovacionado, se potenció con la presencia de dirigentes-candidatos del campo, como Ulises Forte (La Pampa), vicepresidente de la Federación Agraria, y Ricardo Buryaile (Formosa), de Confederaciones Rurales Argentinas.
«Estamos trabajando para colocar al próximo presidente de los argentinos», fue la arenga final de Alfonsín hijo. El segundo candidato a diputado nacional por la provincia de Buenos Aires despertó una ovación en el colmado Gran Rex y las barras de la segunda y tercera bandeja explotaron con el cántico «Se siente, se siente, Lilita presidente». Sin la sombra de Cobos, su principal competidor por la candidatura 2011 no PJ, la titular de la Coalición Cívica aprovechó el efecto Alfonsín para posicionarse como la principal oferta presidencial del ACS, aunque por ahora sólo se postula a diputada por la Capital Federal en el tercer lugar. «Trabajaremos para que el futuro sea un nuevo 83 en la Argentina», se despachó la ex candidata a presidente.
En los pasillos del teatro, deambulaba inquieta la tropa cobista de la provincia de Buenos Aires. El intendente de Junín, Mario Meoni, el diputado Daniel Katz y el candidato Mario Barbieri, jefe comunal de San Pedro y tercer candidato en la boleta bonaerense. Hace apenas cinco días, a horas del cierre de inscripción de los candidatos, el acuerdo entre la UCR cobista y la Coalición de Carrió estuvo a punto de desaparecer. Las huestes del vicepresidente se habían retirado del frente electoral disconformes por el veto de Carrió al intendente Héctor Gutiérrez (Pergamino) -rechazado por tener un proceso judicial abierto en su contra- y por el supuesto incumplimiento del acuerdo sobre el reparto de lugares en la boleta electoral.
Ayer esa tensión se notó en el acto de presentación de candidatos y el cobismo justificó la ausencia del vicepresidente por su rol institucional. «A Carrió simplemente la ignoramos, pero la factura la va a pagar en 2011, cuando Cobos sea el candidato a presidente de este espacio», advirtió uno de los principales operadores del jefe del Senado. Consciente de esa puja adelantada por el 2011, Carrió aprovechó al máximo la mística alfonsinista y se mostró como la jefa política de ese espacio opositor con proyección presidencial. Frente a las candidaturas testimoniales del kirchnerismo, el frente UCR-CC se sumergió anoche en las candidaturas precoces.
Sin cortar el tránsito sobre la avenida Corrientes, los militantes de la UCR y del ARI se acoplaron a un prolijo acto de campaña. La puesta en escena dentro del teatro fue televisiva, tan televisiva que Carrió cerró su discurso con una referencia a Marcelo Tinelli y sus imitaciones de políticos. «Como dice Tinelli tenemos de punteros a San Pedro y a Alfonsín y por eso vamos a ganar las elecciones». La troupe de candidatos se ubicó en una grada detrás de una mampara transparente con el logo del Acuerdo Cívico y Social.
Entre los caciques radicales, estuvieron presentes Enrique «Coti» Nosiglia, Jesús Rodríguez, Adolfo Stubrin, Nito Artaza, Ricardo Colombi y hasta Ricardo López Murphy.
La cadena de oradores se inició con el economista Alfonso Prat Gay, quien tibio en su discurso, se ganó algunos gritos como «poné más huevo». El ex titular del Banco Central concentró sus palabras en la propuesta económica: «Queremos que se grave la renta financiera, que se coparticipe el impuesto al cheque, un monotributo social y una economía más humana y solidaria». Luego fue el turno de Ricardo Gil Lavedra, otro de los candidatos porteños: «Desde el Congreso, con una nueva mayoría, vamos a derogar los superpoderes, a sancionar la ley de acceso a la información pública y reglamentar la distribución de la publicidad oficial. También vamos a dejar sin efecto la nefasta reforma al Consejo de la Magistratura».
Forte, el candidato a diputado por La Pampa sponsoreado por Cobos, fue uno de los más aplaudidos y le reclamó al Gobierno que «deje de amenazar, de asustar, de creer que son la salvación o el caos». Alfonsín hijo lo sucedió en el atril y despertó la mayor ovación de la noche. De pie, todos coreaban el nombre de su padre, y otros, como el senador de Santa Cruz, Alfredo Martínez, rompió en lágrimas. Sólo quedaba tiempo para el discurso de Margarita Stolbizer.
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