Mientras el Gobierno de Javier Milei busca aplicar en la Argentina una reforma laboral, hay muchos países que implementaron la jornada laboral de cuatro días. Portugal y Bélgica fueron los últimos que redujeron la semana de trabajo y dieron a conocer cómo les resultó. Conocé más.
Jornada laboral de cuatro días: cómo le fue a los países que redujeron la semana laboral
El sueño de trabajar solo cuatro días a la semana por el mismo salario parece estar más cerca de convertirse en realidad. A nivel mundial, conocé los resultados de las pruebas pilotos.
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¿Qué países tienen jornada laboral de 4 días?
Portugal
Tras implementar el programa piloto que contó con la participación de medio centenar de empresas y casi 1.000 trabajadores, la jornada laboral de cuatro días resultó exitosa. Quienes están detrás de la iniciativa afirmaron que registraron más pros que contras y aseguraron que no hace falta contratar empleados para implementar la iniciativa.
El personal dijo que la medida promovió una mejora significativa en la salud mental y la conciliación familiar de los trabajadores. También mencionó una reducción del estrés, al punto de que el nivel de ansiedad cayó un 21%.
Bélgica
El país implementó la iniciativa hace un año. De todas formas, el resultado no fue el esperado: entre 0,5% y 1% adoptaron esta nueva forma de trabajo. Cabe mencionar que, al igual que ocurrió en Portugal, la medida ayudó positivamente a los empleados a la hora de conciliar su vida personal y laboral.
Quienes aplicaron la jornada de 38 horas semanales -que se compactan en cuatro días- trabajan en Securex, Acerta Consult y Attentia, los principales secretariados sociales del país. Cada día laboral dura hasta nueve horas y media, y el sueldo se mantiene.
Reino Unido
Un experimento en Reino Unido demostró que reducir la jornada laboral no solo aumenta significativamente la productividad de los empleados, sino también las ganancias de las empresas, cuyos líderes calificaron la iniciativa de "extremadamente exitosa".
Unas 61 compañías participaron en lo que hasta ahora es el ensayo más abarcador que se hizo de un esquema laboral de cuatro días. A la mayoría de los ejecutivos les gustó tanto que decidieron adoptarlo de forma indefinida, mientras que el 15% de los empleados aseguraron que “ninguna cantidad de dinero” los convencería de volver a trabajar cinco días a la semana.
En ese periodo de tiempo, las empresas que probaron la semana laboral de cuatro días registraron más ingresos y menos deserción de personal. Los beneficios también se sintieron entre la mayoría de los trabajadores, quienes percibieron menos agotamiento y emociones negativas, y más satisfacción con el equilibrio entre el trabajo y la vida.
Las compañías se animaron a mantener el mismo salario de sus trabajadores durante el experimento, pero tuvieron la libertad de usar varios métodos para recortar el tiempo de trabajo, desde dar un día libre a la semana hasta reducir a 32 las horas laborables.
Italia
Intesa y Lavazza son algunas de las empresas que están experimentando la jornada laboral de cuatro días. Una medida que nació por el impulso de reorganizar el trabajo durante el período de pandemia y la necesidad de protección y ahorro de energía en las oficinas.
Entre las principales novedades se encuentra la semana corta de 4 días y de 9 horas de trabajo (36 horas en total) con igual remuneración, de forma voluntaria y compatible con los requerimientos técnicos y productivos.
En realidad, los últimos datos de Eurostat (actualizados a 2022) muestran una tendencia contraria en toda Europa: en Italia, por ejemplo, unos 2 millones de trabajadores permanecen en la obra 50 horas a la semana, frente a las canónicas 40 horas (8 horas al día durante 5 días).
Se trata del 9,4% del total de trabajadores (unos 23 millones) y el fenómeno en Europa afecta mucho más a los autónomos (30%) que a los asalariados (4%).
Chile
El presidente de Chile, Gabriel Boric, promulgó en abril de este año la Ley que permite reducir de forma gradual la jornada laboral de 45 a 40 horas semanales, un proyecto que estuvo en trámite durante los últimos seis años.
La iniciativa implica la modificación al artículo 22 del Código de Trabajo, que establece una jornada laboral de 45 horas semanales a través de una disposición para disminuirla progresivamente hasta las 40 horas semanales.
La normativa incluye, entre otros beneficios para los trabajadores, la compensación de horas extraordinarias por hasta cinco feriados adicionales, además de establecer sistemas excepcionales de trabajo y el sistema de jornada cuatro por tres, que consideran áreas como minería, pesca o turismo.
Su implementación se realiza de manera gradual en un plazo de cinco años a contar desde este año. Durante el primer año de la implementación de la ley se reduce una hora, al tercer año dos horas y al quinto año las dos horas finales.
Según indica el portal informativo del Gobierno chileno, ya hay más de 500 empresas que comenzaron a implementar la reducción de la jornada laboral a 40 horas, al tiempo que cualquier firma tiene la posibilidad de adelantar la implementación de la Ley.
Islandia
La prueba piloto se realizó entre 2015 y 2019, y contó con la participación de 2.500 empleados de la administración nacional y del Ayuntamiento de Reykjavik. La jornada se redujo de 40 a 35 horas y, según los primeros resultados, la productividad se mantuvo o mejoró, sin reducir los salarios.
La prueba piloto fue calificada de "exitosa" por los organizadores de la medida, que además permitió un cambio significativo en el país: casi el 90% de la población activa tiene un horario reducido u otras adaptaciones.
Los resultados también apuntaron a una reducción del estrés laboral y una mejora en el equilibro entre la vida personal y el empleo.
Ecuador
El país fue el primero en la región que avanzó en la jornada laboral de cuatro días: la semana de trabajo pasó a ser de 40 horas, con ocho horas máximas por día y cuatro adicionales el sábado, con descanso obligatorio en la tarde del sexto día y todo el domingo.
España
El Gobierno español lanzó este año un proyecto que ayuda a las Pymes a reducir la semana en al menos medio día, sin disminuir los salarios. Según las autoridades, la jornada laboral de cuatro días busca promover el bienestar de los empleados, la productividad laboral y el desarrollo empresarial del país.
Para fomentar la iniciativa, España se comprometió a otorgar ayuda económica a aquellas compañías que reduzcan la jornada laboral de su planta. En detalle, el Ministerio de Industria asignó 9,6 millones de euros en subvenciones para empresas de hasta 250 trabajadores que recorten al menos un 10% la jornada de trabajo y mantengan el salario de las plantillas durante dos años.
Entre otros puntos, la medida reduce un mínimo del 10% el horario de tareas a sus trabajadores de forma semanal, es decir, no vale seguir trabajando igual y aumentar los días libres a final de año, por ejemplo. Si un trabajador tiene una jornada semanal de 40 horas (la más común), pasará a trabajar, como mínimo, 34 horas.
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