Juicio por Báez Sosa: el 15 de agosto habrá una audiencia oral para presentar apelaciones

Luego de que los ocho rugbiers fueran condenados a prisión por el homicidio de Fernando Báez Sosa, en esta nueva audiencia todas las partes podrán apelar a la decisión de la Justicia.

Los rugbiers condenados.

Telam

El Tribunal de Casación Penal fijó el 15 de agosto como la fecha para la audiencia oral de apelaciones por el fallo condenatorio a los rugbiers responsables del homicidio de Fernando Báez Sosa. Cinco de ellos fueron sentenciados a prisión perpetua y tres a 15 años de reclusión.

La Sala II de dicho tribunal, integrada por los jueces Mario Kohan, Fernando Mancini Hebeca y María Florencio Budiño, dispuso que la audiencia se lleve a cabo a partir de las 11 de ese día en el primer piso de la sede judicial de calle 43 al 874 de La Plata.

En la primera resolución, los jueces rechazaron el planteo de ofrecimiento de prueba testimonial por parte de la defensa.

Desde el lado de la querella, los padres de la víctima, representados por Fernando Burlando, apelaron al Tribunal de Casación y pidieron que los tres rugbiers condenados a 15 años de cárcel como partícipes secundarios reciban prisión perpetua al igual que el resto de los sentenciados.

Los fiscales Juan Manuel Dávila y Gustavo García se sumaron a la apelación y también solicitaron prisión perpetua para todos.

Fernando Báez Sosa: la apelación de la Querella

Los abogados del particular damnificado consideraron en su apelación a la que accedió Télam que es un "absurdo" o una "arbitrariedad" la sentencia "por carencia de logicidad en la fundamentación y falsa motivación en la determinación del momento en el que se verifica el dolo homicida", al igual que en la "selección y valoración de la prueba para entender como secundaria la participación de los condenados" Cinalli, Lucas Pertossi y Viollaz.

Además, motivaron el recurso en la "errónea aplicación de un precepto legal: concretamente al entender como secundaria la participación de los condenados". Agregaron que "sin ningún tipo de fundamento, sin exponer el iter por el que llega a una conclusión totalmente arbitraria" el Tribunal "hace coincidir la aparición del dolo homicida con el momento en que Fernando Báez Sosa queda de rodillas e indefenso en el suelo" sin "analizar si quiera mínimamente una pluralidad de indicios con los que se demuestra que el dolo homicida tuvo su génesis antes del inicio del ataque".