Un integrante de Pink Floyd quiere vender su mansión de 12 millones de dólares y no puede por este insólito motivo

El cantante adquirió esta casa hace 10 años. Conocé los detalles.

David Gilmour ha comenzado una demanda legal contra la Corona Británica.

El integrante de la banda Pink Floyd, David Gilmour, está intentando vender una de sus propiedades, pero por un tema legal no se lo permiten. Se trata de una mansión que está valuada en más de 12 millones de dólares, que actualmente le pertenece a la Corona británica.

Tras una serie de intentos para vender la mansión, al artista no le quedó otra más que iniciar acciones legales. Conocé los detalles.

Cómo es la mansión de David Gilmour, de Pink Floyd

Gilmour, a través de su empresa, que era el único director, compró la propiedad en 2011, un balneario llamado Medina House, ubicado frente al mar de Hove, en Sussex, Inglaterra. Era un establecimiento público para mujeres con con piletas de agua marina y baños para relajarse.

Esta propiedad cuenta con una superficie de 580 m2, en la que se desplaza un patio, un jardín cubierto, seis habitaciones, cuatro baños y cuatro salas de recepción distribuidas en tres plantas. También tiene una tienda de vinos, un salón, un gimnasio y una biblioteca, y una de las salas de recepción, que incluye un comedor, mide nada menos que 15 metros.

¿Por qué no puede vender su mansión?

En 2014 la empresa con la que había comprado la propiedad se disolvió, pero debido a un descuido legal no le fue transferida al propio Gilmour.

A menos que los activos de una empresa se transfieran antes de que la empresa se disuelva, estos se convierten automáticamente en bienes vacantes y se titulan bajo la propiedad del Estado, según la legislación del Reino Unido. Gilmour afirma que la casa no fue puesta a su nombre debido a un error administrativo, y ha recurrido al Tribunal Superior de Londres, donde está demandando al Fiscal General.