Uruguay cerró 2024 con una cifra histórica con 16.870 residencias concedidas, lo que representa un crecimiento del 74% respecto a 2023, cuando se otorgaron 9.689 residencias, y del 167% comparado con 2022, que registró 6.310 casos.
Uruguay concedió un 74% más de residencias que en 2023
El país concedió 16.870 residencias en 2024 con fuerte predominio de migrantes latinoamericanos y un impacto creciente en consumo e inversión.
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Uruguay mantiene políticas migratorias abiertas que fortalecen su capital humano y su proyección como refugio de estabilidad en América Latina.
La aceleración migratoria hacia el país se intensifica año a año, consolidando a Uruguay como uno de los destinos más atractivos de Latinoamérica para profesionales, inversores y familias que buscan estabilidad política, seguridad jurídica y calidad de vida. La tendencia muestra un patrón consistente: tras la pandemia, Uruguay ha logrado posicionarse como un refugio seguro en una región marcada por volatilidad económica y tensiones políticas.
El origen de las residencias concedidas en 2024 muestra una marcada concentración latinoamericana, con América aportando 15.202 casos, lo que representa el 90% del total. Europa alcanzó 1.023 residencias (6% del total) y Asia sumó 591 (3,5%).
Argentina, Cuba, Brasil y Venezuela concentran el 60% de las residencias
Argentina encabeza el ranking con 4.499 residencias, representando el 26,7% del total y mostrando un crecimiento del 78% respecto a 2023, cuando se concedieron 2.527. En solo dos años, las residencias a ciudadanos argentinos pasaron de 784 en 2022 a 4.499 en 2024, lo que implica un crecimiento del 474%.
Cuba ocupa el segundo lugar con 2.724 residencias (16,1% del total), evidenciando un crecimiento del 72% frente a las 1.580 de 2023. Brasil se ubica tercero con 2.554 residencias (15,1%), prácticamente duplicando las 1.303 del año anterior. Venezuela completa el top cuatro con 1.794 residencias (10,6%), aumentando 87% respecto a las 958 de 2023.
Más atrás aparecen Colombia con 906 residencias (69% más que en 2023), Perú con 694 (más que duplicando el año anterior), Paraguay con 524 (156% de aumento), Bolivia con 348 (162% más), Chile con 261 y Estados Unidos con 260. Entre los países con presencia significativa también destacan India con 412 residencias, Rusia con 354, Alemania con 256 y República Dominicana con 226.
El boom argentino: estabilidad y proximidad como imanes
El caso argentino es particularmente por su volumen y aceleración. Este flujo masivo refleja la búsqueda de estabilidad por parte de profesionales, familias e inversores argentinos que encuentran en Uruguay seguridad jurídica, estabilidad macroeconómica, un sistema financiero sólido con acceso al dólar, calidad de vida y proximidad geográfica y cultural.
El impacto económico es tangible en varios frentes. El mercado inmobiliario ha sido el principal beneficiado, con incrementos en demanda de compra y alquiler tanto en Montevideo como en Punta del Este, Colonia y Maldonado. Los precios en zonas premium se han sostenido o aumentado gracias a esta demanda externa. El sector reporta que una proporción significativa de las transacciones en dólares en 2024 estuvo vinculada a compradores argentinos.
En consumo, estos más de 16.800 nuevos residentes representan un impulso significativo, especialmente en segmentos de poder adquisitivo medio y alto. Sectores como automotriz, electrodomésticos, educación privada y salud privada reportan crecimiento vinculado directamente a este fenómeno migratorio. El comercio minorista en zonas de alta concentración de extranjeros también ha mostrado dinamismo adicional.
Inversión, divisas y talento calificado que fortalecen la economía
Desde una perspectiva financiera, una porción de estos nuevos residentes arriba con proyectos de inversión, especialmente en áreas como tecnología, gastronomía, servicios profesionales y comercio exterior. Uruguay ofrece beneficios tributarios para nuevos residentes fiscales que resultan particularmente atractivos: no tributación sobre rentas de fuente extranjera durante los primeros años y un régimen fiscal competitivo para inversores.
El ingreso de divisas asociado a este flujo migratorio, que incluye inversiones, consumo y ahorro, fortalece la liquidez del sistema financiero y aumenta la demanda de productos financieros en dólares. Los bancos han reportado apertura de cuentas y colocación de depósitos vinculados a esta nueva población residente.
En términos de capital humano, el perfil calificado de gran parte de esta migración fortalece sectores clave donde Uruguay enfrenta escasez de talento local. Los flujos desde Venezuela, Cuba y Argentina incluyen profesionales de IT, finanzas, ingeniería, salud y servicios especializados que se insertan en el mercado laboral uruguayo o desarrollan emprendimientos propios.
Crisis que expulsan talento hacia Uruguay
Los casos de Cuba y Venezuela responden a dinámicas de crisis que expulsan talento. Cuba mostró un salto desde 2.304 residencias en 2022 a 2.724 en 2024, incluyendo profesionales de la salud, técnicos e ingenieros. Venezuela mantuvo su tendencia migratoria sostenida, pasando de apenas 85 residencias en 2022 a 1.794 en 2024, con un perfil altamente calificado que aporta valor al mercado laboral uruguayo.
El impacto se multiplica en cadenas de valor vinculadas a la integración de nuevos residentes: servicios profesionales como contadores, abogados y escribanos, educación, salud, seguros, telecomunicaciones y servicios financieros experimentan una demanda adicional que genera empleo y actividad económica.
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