A partir de la presentación del proyecto del PIT-CNT para reducir la jornada de trabajo de 48 a 40 horas en el Uruguay vuelve el debate a la mesa antes de las elecciones presidenciales de octubre.
El PIT-CNT promueve la reducción de la jornada laboral, ¿cómo le fue a otros países que la aplicaron?
La central sindical presentó ante el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social su plan de 40 horas semanales.
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Este martes, el presidente de la central sindical, Marcelo Abdala, encabezó la conferencia de prensa donde se presentaron los informes técnicos del proyecto para disminuir la jornada de trabajo, el cual también será presentado a los candidatos presidenciales de los distintos partidos políticos.
Durante su presentación en el Ministerio de Trabajado y Seguridad Social (MTSS), el líder de la central sindical aseguró que la reducción de las horas laborales "tiene un impacto positivo para la productividad" y genera beneficios para la salud de los trabajadores. Ahora bien, ¿qué ocurrió en otras partes del mundo?
La flexibilidad europea
Uno de los países pioneros en implementar la reducción de la carga horaria fue Francia. Ya en 1936 adoptó un sistema de 40 horas semanales, mientras que en 2022, tras años de debate, comenzó a regir una semana laboral de 35 horas, con efectos dispares.
Más allá de la norma vigente, los diferentes gobiernos de ese país adoptaron sucesivas medidas para otorgar flexibilidad a las empresas, de manera que los trabajadores pudieran realizar horas extras, una cuestión que hoy es moneda corriente en el país europeo.
Por fuera del caso francés, la mayoría de los países europeos tienen por ley un convenio de 40 horas semanales, aunque con convenios por debajo de esa cifra. En muchos de ellos, como Reino Unido, Portugal y Bélgica, avanzan incluso experiencias con una semana laboral de cuatro días.
El caso islandés
En el caso de Islandia, se realizó una prueba piloto entre 2015 y 2019, reduciendo la carga semanal de 40 a 35 horas a 2.500 empleados del gobierno nacional y el Ayuntamiento de Reykjavik, la capital.
Finalizado el “experimento”, las autoridades consideraron que tuvo éxito y mejoró la productividad, sin reducción salarial, de manera que esa norma se aplicó a la mayoría de la población.
América, un caso aparte
En la región, Ecuador fue uno de los primeros en fijar 40 horas semanales de trabajo. Colombia, en tanto, se encuentra en proceso de reducción de su jornada laboral, con una disminución gradual.
Algo similar ocurre en Chile, donde el 26 de abril de este año, la carga horaria semanal pasó de 45 a 44 horas, con el objetivo de que quede en 40 horas en 2028.
En tanto, en Brasil se aprobó un proyecto de ley que permite la jornada laboral de cuatro días, mientras en Argentina existen varias iniciativas del sindicalismo y dirigentes de la oposición al respecto, aunque la reforma laboral que impulsa el gobierno de Javier Milei no contemplaría medidas en ese sentido.
Finalmente, al comparar con América del Norte, tanto Estados Unidos como Canadá cuentan con una carga horaria semanal de 40 horas, mientras en México está intentando reducirse a ese rango, desde las 48 horas actuales.
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