14 de marzo 2023 - 08:40

El Senado vota hoy las rebajas del IRPF y del IASS

Los legisladores harán una votación exprés sin debate ni modificaciones al texto enviado por el Ministerio de Economía y Finanzas.

Hoy ingresa al Parlamento uruguayo el proyecto de Ley de Rendición de Cuentas.

Hoy ingresa al Parlamento uruguayo el proyecto de Ley de Rendición de Cuentas.

Foto: AFP

La Cámara de Senadores vota hoy el proyecto de rebaja del Impuesto a la Renta de las Personas Físicas (IRPF) y del Impuesto a la Asistencia de la Seguridad Social (IASS) en Uruguay, luego de que el jueves pasado consiguiera la aprobación por unanimidad en la Comisión de Hacienda tras escuchar la exposición de la ministra de Economía y Finanzas (MEF), Azucena Arbeleche.

La modalidad será de votación exprés, ya que los legisladores no modificarán ni debatirán el texto enviado por el Poder Ejecutivo el pasado 2 de marzo, luego del discurso de Rendición de Cuentas del presidente Luis Lacalle Pou frente al Parlamento, cuando anunció oficialmente el “alivio tributario”.

Según Arbeleche, el recorte impositivo alcanza a 327 mil trabajadores, y de ellos “unos 200 mil tienen un beneficio muy significativo”; mientras que 63 mil empleados dejan de pagar el IRPF.

Asimismo, durante su exposición de la semana pasada, enfatizó que los cambios propuestos al IASS “alcanzan a todos los jubilados y pensionistas” y que “20 mil dejan de pagar” este impuesto, una afirmación que la Organización de Pensionistas y Jubilados (Onajpu) cuestionó, según informó Prensa Latina.

La propuesta también incluye modificaciones impositivas en beneficio de micro y pequeñas empresas.

Según el Frente Amplio, para el 70 por ciento de las familias uruguayas de menores ingresos “no hay ninguna medida”.

Los argumentos detrás de la baja de impuestos

Durante la presentación y defensa del proyecto de rebaja impositiva, Arbeleche señaló los principales hechos que permiten avanzar con la renuncia fiscal en el país. Lo mismo hará en Diputados, una vez que el texto llegue con media sanción a la Cámara Baja.

En este sentido, el argumento fundamental detrás de la rebaja impositiva es el crecimiento del Producto Bruto Interno (PBI) del país, así como la consolidación fiscal lograda a partir de la Ley de Urgente Consideración (LUC).

Al respecto, Arbeleche presentó un gráfico que resume los datos más importantes: durante el 2022, el PBI superó las expectativas con un crecimiento anual del 5%, luego de un buen 2021, donde el crecimiento alcanzó el 4,4%. Esto ocurrió luego de una caída del 6,1% del PBI en el 2020 —en el contexto de los momentos más duros de la pandemia de Covid-19 y su impacto en las economías internacionales—, y de varios años donde el crecimiento no alcanzó el 2% anual.

A su vez, el 2023 tiene proyectado un crecimiento potencial del 2,1% a partir de la agenda de reformas.

Según los informes técnicos del MEF, el buen manejo de los recursos públicos durante los últimos tres años es lo que permite el alivio tributario, luego de haber cumplido con los tres pilares de la regla fiscal: resultado fiscal estructural (-2,4%), tope de gasto (variación real efectiva del -0,5%) y tope de endeudamiento (1.813 millones de dólares de endeudamiento neto).

Esto, a su vez, es compatible con el aumento del gasto público, que contempla para el 2023 y el 2024 una renuncia fiscal de 150 millones de dólares anuales —80 millones corresponden a la rebaja del IRPF y 30 millones, a la del IASS—; y se estima en 469 millones de dólares para este año, y 487 millones para el año que viene (+1,5% y +2%, respectivamente).

Los objetivos de la rebaja

Asimismo, Arbeleche defendió los objetivos de la rebaja en general aumentar el ingreso real disponible de las personas y mejorar la situación financiera de micro y pequeñas empresas, fomentando la formalidad—, y de las modificaciones de cada impuesto, en particular.

Respecto del IRPF, el fin del gobierno es “aliviar la carga tributaria de los trabajadores contribuyentes de menores ingresos y a los que tienen hijos a cargo” a partir del aumento de las deducciones, lo que se entiende también como un primer paso hacia un impuesto a la renta, y no a los salarios.

A modo de ejemplo, la presentación pone, entre otros, el caso de una persona que gana un sueldo nominal de 60.000 nominales (45.500 líquidos), con un hijo menor y un alquiler de 18.000 pesos por mes. Esta persona, sin la reforma, debe pagar 22.164 pesos anuales en concepto de IRPF —1.847 pesos por mes—; mientras que, con la rebaja, pasaría a pagar 10.054 pesos anuales, un 55% menos.

En cuanto al IASS, los objetivos son el alivio fiscal a jubilados y pensionistas que pagan impuestos, así como un mayor beneficio a los contribuyentes de IASS con menores pasividades.

Como ejemplo, una person que cobra una pasividad de 65.000 pesos mensuales, actualmente debe pagar 23.664 pesos anuales en concepto de IASS —1.972 pesos por mes—; mientras que, con la reforma, pasaría a pagar 16.872 pesos al año, lo que significa una rebaja del 29%.

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