Votan Jujuy, La Rioja y Misiones, en mes que definirá el poder en un tercio del país

Día con atractivo nacional: primeros PJ y JxC que arriesgan poder y primer gobernador que busca reelegir; aspirante a la Rosada que espera empujón y juega como convencional (incógnita FIT-U), y 3er. provincialismo que expone. Pesa alerta por revés MPN.

Sprint final. El ministro Wado de Pedro y el riojano Ricardo Quintela, con apoyos mutuos; el misionero Hugo Passalacqua, en otro provincialismo que arriesga; Carlos Sadir, la carta de Gerardo Morales en Jujuy.

Sprint final. El ministro Wado de Pedro y el riojano Ricardo Quintela, con apoyos mutuos; el misionero Hugo Passalacqua, en otro provincialismo que arriesga; Carlos Sadir, la carta de Gerardo Morales en Jujuy.

Tras las compulsas del 16 de abril en Neuquén y Río Negro que abrieron el desdoblado calendario de votaciones 2023, otras tres provincias -Jujuy, La Rioja y Misiones- entraron en la cuenta regresiva hacia los comicios a gobernador del próximo domingo, en el inicio de un supermayo electoral que delineará el mapa político desde diciembre en un tercio del país (el octeto se completará el 14-M con un pelotón de otras cinco elecciones locales).

Ese 7 de mayo concitará la atención nacional, con un combo de atractivos que incluye, entre otros ejes, al primer gobernador en buscar este año su reelección y al primer distrito del Frente de Todos en arriesgar el poder en medio de las tensiones políticas, inflacionarias y cambiarias (La Rioja); al primer enclave de JxC en pelear una continuidad, con un precandidato presidencial que juega de convencional constituyente (Jujuy) y al tercer provincialismo en exponerse (Misiones). Un interés que derivó en un desfile de referentes nacionales, sobre todo de JxV pero menguado en el caso del FdT.

Como otros 15 Ejecutivos, los gobiernos de La Rioja, Jujuy y Misiones -nucleados en el Norte Grande- optaron por desdoblar para provincializar la discusión en las urnas y esquivar potenciales arrastres negativos derivados de una contienda en simultáneo con la presidencial de octubre.

Pero ese desafío de sostener el poder anotó en el inicio del calendario electoral 2023 un dato inquietante sobre la verdadera fortaleza de los oficialismos ante una ciudadanía desgastada: el ruidoso traspié del Movimiento Popular Neuquino, que el 16-A terminó con 60 años de comando con la caída de Marcos Koopmann ante Rolando Figueroa (del transversal frente Comunidad).

Dos de los gobernadores de las provincias con comicios el domingo se despedirán de la función: el radical Gerardo Morales -sin posibilidad de reelegir-apuesta a la continuidad de Cambia Jujuy con la candidatura de su ministro de Hacienda, Carlos Sadir, mientras que el misionero Oscar Herrera Ahuad aspira a que tome la posta un exmandatario del Frente Renovador de la Concordia, Hugo Passalacqua.

El único en este turno -y el primero del año- en buscar su reelección es el peronista riojano Ricardo Quintela, quien viene de recibir el viernes in situ el respaldo del ministro del Interior, Eduardo “Wado” de Pedro, cuya precandidatura presidencial arengó. Un triunfo de Quintela fortalecería ese posicionamiento puertas adentro del FdT nacional de cara a las PASO del 13 de agosto (un papel que aspiran a jugar otros gobernadores del PJ que también buscarán reelegir el 14-M).

Señales explícitas de la votación local con traducción directa en la discusión presidencial son las que busca también Morales, que espera un amplio triunfo para contabilizarlo como espaldarazo al radicalismo en general y a su precandidatura a la Rosada en especial, en medio de los tironeos con el PRO que signan a un afiebrado Juntos por el Cambio nacional.

Con ese fin, el presidente de la UCR jugará un rol clave y visible en los comicios del domingo: su nombre estará en el primer cuerpo de la boleta de Cambia Jujuy, como primer candidato a convencional constituyente, en clara búsqueda de traccionar votos hacia Sadir y el resto de los candidatos.

Ayer Morales recibió en Jujuy al jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, otro de los precandidatos presidenciales de JxC y que descuenta una victoria en la provincia norteña como viento a favor para la coalición.

Con lecturas menos atadas a inmediatas traducciones nacionales se inscribe la puja misionera, donde por tercera vez en el año un provincialismo pondrá en juego el poder. El Frente Renovador de la Concordia, que lidera Carlos Rovira, buscará otros cuatro años de gestión con Passalacqua, en una compulsa que asoma polarizada con JxC (que postula al radical Martín Arjol y a Natalia Döpler, del PRO).

Por su parte, Cambia Jujuy pulseará con una oferta peronista partida (el PJ oficial está en el Frente Justicialista, con la postulación de Rubén Rivarola y la diputada nacional Carolina Moisés). Y se suma la incógnita de la izquierda, con buenas performances electorales en los últimos años y alienta para la gobernación al diputado nacional Alejandro Vilca (FIT-U).

En La Rioja -que también elegirá convencionales-, Quintela disputará su sueño de continuidad con el diputado Felipe Álvarez (JxC) y con el libertario Martín Menem (sobrino del fallecido expresidente Carlos Menem), quien viene de recibir el respaldo in situ del líder de Libertad Avanza, Javier Milei.

El afiebrado calendario continuará el 14 con otras 5 elecciones: La Pampa, Salta, San Juan, Tucumán y T. del Fuego. Un pelotón que sumará a otros 4 gobernadores en busca de reelegir: el pampeano Sergio Ziliotto y el sanjuanino Sergio Uñac por el PJ, y el salteño Gustavo Sáenz y el fueguino Gustavo Melella por provincialismos (además del caso del justicialista tucumano Juan Manzur, que busca ser vice en dupla con Osvaldo Jaldo).

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