Barbijos: cuánto cuestan, dónde comprarlos y qué conviene

Las farmacias sólo venden el descartable, que no es el recomendable. Pro y contras de cada uno. Por qué no usar el N95 (profesional) y otros tips.

El abanico es grande. Los costos oscilan entre los $100 y $500 cada uno dependiendo del modelo y el material de confección.

El abanico es grande. Los costos oscilan entre los $100 y $500 cada uno dependiendo del modelo y el material de confección.

Entre tantos mitos y verdades que va dejando la pandemia del Covid-19, mucho se habló sobre la real utilidad del tapaboca como método preventivo para mitigar los riesgos de contagio. Al principio –y durante las primeras semanas- los especialistas recomendaban no usarlo.

Poco a poco algunos intendentes lo fueron incorporando en sus distritos y finalmente fue el propio Ministerio de Salud de la Nación quien recomendó su uso. “En una epidemia la información y la evidencia científica cambian rápidamente y hay que adaptarse rápidamente al cambio de la situación epidemiológica”, aclaró en un comunicado.

Sin embargo, el organismo aclaró que el barbijo no está recomendado para todo el territorio nacional sino únicamente en zonas de transmisión de coronavirus. Inmediatamente el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires recogió el guante y declaró obligatorio -a partir de mñana- el uso de tapaboca en el transporte público y locales de atención al público.

Descartables y profesionales, no

A partir de esta confirmación surgen varias preguntas: ¿Qué comprar, en donde, qué materiales son confiables y cuáles no?. Según los especialistas, las mascarillas quirúrgicas, barbijos o tapabocas comunes(los que hoy se consiguen en farmacias) no son los ideales, pues no filtran el aire inhalado y tienen muy poca resistencia al ingreso del virus. No duran más de 5 horas y que hay que cambiarlos cada vez que se humedecen.

barbijo descartable.jpg
Las mascarillas quirúrgicas, barbijos o tapabocas comunes(los que hoy se consiguen en farmacias) no son los ideales, pues no filtran el aire inhalado y tienen muy poca resistencia al ingreso del virus.

Las mascarillas quirúrgicas, barbijos o tapabocas comunes(los que hoy se consiguen en farmacias) no son los ideales, pues no filtran el aire inhalado y tienen muy poca resistencia al ingreso del virus.

En el lado opuesto están los barbijos de alto riesgo, también llamados N95, porque llegan a filtrar hasta el 95% de las partículas aéreas. Si bien éstos son los indicados para el contacto con personas Covid-19 positivo, hay pocos en el mercado y sólo pueden ser adquiridos por personal de la salud. Además, estas máscaras no se recomiendan para el uso del público porque se requiere capacitación para el uso y el retiro adecuado. De lo contrario, el riesgo infeccioso puede aumentar.

Recientemente se publicó una resolución que prohíbe "la comercialización, en el ámbito de la Ciudad de Buenos Aires, de los barbijos N95 a cualquier persona que no acredite ser profesional o personal del servicio de salud y a las personas jurídicas que no tengan por objeto la prestación de ese servicio". La multa, anunciaron, será de entre $15.000 a $111.000 pesos más clausura y/o inhabilitación del comercio que incumpla esta norma.

Entre el descartable y el N95 están los de en tela. Muchos de ellos son artesanales y están fabricados por emprendedores de ocasión, que venden estos productos en las distintas plataformas virtuales, con envío a domicilio. La ventaja de los tapabocas de tela es que pueden lavarse con agua caliente y jabón. En este caso, lo que se cambia a diario (o varias veces al día según su uso) es el papel que se coloca por dentro.

Pero ¿son todas las telas efectivas o hay algunas más resistentes que otras?. La Universidad de Cambridge realizó un estudio con tapabocas hechos con distintos materiales. Proyectaron sobre ellos partículas de Bacteriófago MS2 de 0.02 (cinco veces más pequeñas que el coronavirus) para medir la eficacia de esas telas. Los fabricados con bolsas de aspiradora tuvieron un 86% efectividad, seguidos por los de paño de cocina (73%) y los confeccionados con algodón y poliester (70%). El dato es que todos los materiales, salvo la tela de bufanda, superaron el 50% de eficacia.

barbijos portada.jpg
Hay desde personalizados, para niños, de neoprene, algodón, polar, doble friselina y tricapa, hasta protectores de plástico desarmables o de dry fit sin costura, cortados a láser, con espacio para filtro de papel.

Hay desde personalizados, para niños, de neoprene, algodón, polar, doble friselina y tricapa, hasta protectores de plástico desarmables o de dry fit sin costura, cortados a láser, con espacio para filtro de papel.

Al respecto, los entendidos recomiendan el algodón, por ser una textura que se adapta bien a la forma de la cara y, además, no suele provocar irritación en la piel.

Mercado infinito

Luego de una primera semana de incertidumbre sobre la real demanda de tapabocas en el mercado local, hoy hay volumen de sobra. Basta con entrar a cualquier plataforma de marketplace, poner en el buscador la palabra “tapabocas” o “barbijos” y aparece un sinfín de alternativas. Los costos oscilan entre los $100 y $500 cada uno dependiendo del modelo y el material de confección. Hay desde personalizados, para niños, de neoprene, algodón, polar, doble friselina y tricapa, hasta protectores de plástico desarmables o de dry fit sin costura, cortados a láser, con espacio para filtro de papel. También hay kits de 10/20 unidades por entre $700 y $1200.

barbijo-tapabocas-mascara-reutilizable-D_NQ_NP_833078-MLA41415418758_042020-F.jpg
Barbijos de plàstico desarmables, una oapción entre tantas.

Barbijos de plàstico desarmables, una oapción entre tantas.

Hecho en casa

Otra opción es hacerlos en casa. Para aquellos que se animen, la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) emitió un comunicado mediante el cual especificó como elaborarlo de la manera correcta (ver video).

Cómo confeccionar un barbijo

Aciertos y errores

Respecto a su uso, uno de los peores errores que cometen las personas es tocar su tapabocas, ponerlos debajo de la nariz o quitárselo de la cara y ubicarlos debajo de su mentón para descansar. Esto es un grave error, lo mismo que usarlo flojo, dejando espacios a los costados. Lo correcto es colocarlo de manera que cubra, hacia arriba, hasta cerca del puente de la nariz y, hacia abajo, por debajo del mentón. También hay que ajustarlo para que quede pegado al rostro, sin dejar espacios libres.

Cabe aclarar que la OMS señala que los tapabocas solo son una protección más y no excluye a las demás. A la par, otras medidas de prevención son lavarse las manos con jabón, usar eventualmente alcohol 70-30 o alcohol en gel, ventilar los ambientes, evitar llevarse las manos a la cara y respetar el distanciamiento social de un metro como mínimo entre las personas.

Dejá tu comentario

Te puede interesar