"El atraso cambiario y la sequía son fulminantes para el agro", advierte el presidente de ARU

Gonzalo Valdéz, presidente de los ruralistas uruguayos, trazó un desolador panorama para la agricultura y la ganadería al corto y mediano plazo.

Con la sequía extrema en Uruguay, Montevideo todavía tiene reservas de agua potable para marzo y abril.

“Este es un gobierno cercano”, dice enfáticamente Gonzalo Valdéz a Ámbito.com, quien preside la Asociación Rural del Uruguay (ARU), la gremial agropecuaria y ganadera más importante del país. Más allá de esa afinidad, hay un punto estratégico que parece separar a los productores del equipo económico al menos: la necesidad de corregir el atraso cambiario. En esa línea no dejan de presentar propuestas y algún reclamo.

- ¿Qué evaluación se hace del estado actual en cuanto al problema de la sequía? ¿Cómo está afectando al sector productivo nacional?

-Estamos en un momento crítico, donde se acumulan por lo menos 3 años de seca. El no haber llovido en el mes de febrero y lo que va de marzo ya no sólo complica el momento, o sea el impacto instantáneo de la sequía, sino que también, y según los rubros, compromete la generación de forraje para el invierno.

En lo que tiene que ver con la agricultura ya podríamos hablar de una de una zafra de verano fracasada. Salvo alguna rara excepción, pero en términos promedio país la cosecha va a ser muy, muy baja, por debajo de las expectativas.

En ganadería, el impacto va a ser para los criadores sobre la primavera - otoño del año que viene. Esto va a terminar afectando también las faenas, ya estamos hablando así del año 2025, 2026 y quizás algo del 2027.

Foto: Valor Agregado

-El sector ha hecho planteos al gobierno, ¿Qué respuestas han obtenido?

-Nosotros más que hacer reclamos, hacemos aportes y propuestas para buscar las herramientas necesarias para los productores. Hemos presentado a varios ministerios u organismos varias medidas. En algunas de ellas coincidimos con el gobierno y se tomaron medidas similares o iguales a las que nosotros planteábamos.

- ¿Cuáles son esas medidas?

-Estamos hablando de esta prórroga de vencimientos, por ejemplo. No estamos pidiendo subsidios ni rebaja de de tributos, simplemente lo que hemos pedido es prórrogas para alivianar un poco el bolsillo de los productores y que puedan manejarse con más libertad en términos financieros.

Pero sí tenemos un tema pendiente y esto ya no es un tema a causa de la sequía, pero es un problema nacional de hace muchísimos años que ahora está muy incrementado, que es el atraso cambiario. Este es muy muy grave para el sector exportador y hoy en día con esta combinación para el sector agro esto es fulminante.

- ¿Faltan respuestas?

- Lo hemos conversado mucho con el Banco Central, con el Ministerio de Economía, con el Ministerio de Ganadería, entre otros. Nuestras reuniones comenzaron en el mes de junio de 2022. En aquel momento se nos decía que el dólar estaba en el valor de sus fundamentos, que no había ningún tipo de desvío, lo que sí había era mucho ingreso de dólares, obviamente, por el aumento de exportaciones que hubo el año pasado.

En diciembre lo volvimos a hablar, ahí nos hablaron de un desvío en el entorno del 12%, aunque nosotros manejábamos que rondaba el 20%. Hoy además estamos terminando una zafra de turismo que trajo dólares a la plaza.

Están las medidas del Banco Central que fueron aumentando las tasas de interés de las letras de regulación monetaria, que ha hecho mas atractivo el invertir en pesos y no en dólares. Entendemos la autonomía del Banco Central, pero también queremos que se de una señal de baja de tasas.

- La semana pasada el presidente Lacalle Pou realizó un informe de gestión y dio algunos anuncios. ¿Esperaba algo especial para el sector? ¿Qué evaluación hace?

- Compartimos muchos de los anuncios hechos por el gobierno. En el tema de la rebaja de impuestos IRPF e IASS, entendemos que es un alivio para los sectores más vulnerables. Hubo también un aumento en la franja de los productores que tributan Imeba, que es una medida temporal y trascendente.

Es un gobierno que hace el esfuerzo por cumplir sus promesas electorales, que sufrió los efectos de la y que optó por mantener una economía abierta y funcionando. En esa crisis el campo siguió funcionando y no hubo nuevos impuestos. Al gobierno le reconocemos eso, el esfuerzo que hizo para cuidar la salud de los habitantes sin apagar la economía. Es un gobierno cercano al agro, que conoce al campo y que no tenemos ninguna traba para hacerle planteos incluso directamente al presidente de la República.