El plebiscito de reforma de la seguridad social que impulsa el PIT-CNT sigue sumando detractores a medida que se acerca la fecha de las elecciones nacionales en la que también se llevará a cabo la consulta popular. Y no solo desde los sectores de la coalición de gobierno, sino también desde el Frente Amplio (FA). En ese sentido, un grupo de 111 economistas y profesionales de carreras similares, se aprestan a lanzar su propia campaña contra la reforma constitucional a través de un portal llamado Frenteamplistas por el No.
El plebiscito del PIT-CNT suma detractores: economistas del Frente Amplio se unen contra la reforma en seguridad social
Un grupo de 111 economistas y profesionales lanza el portal Frenteamplistas por el No, que reunirá los argumentos contra la iniciativa.
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El plebiscito de la seguridad social cuenta con pocos apoyos políticos e institucionales desde que la idea comenzó a materializarse en la papeleta y en la campaña de junta de firmas para habilitar el referéndum. Esto no es una novedad ni algo que preocupara particularmente a la central sindical, en tanto su objetivo era movilizar a la ciudadanía. Sin embargo, en las últimas semanas se ha consolidado una campaña de oposición que, lejos de quedar encasillada en los partidos oficialistas, empieza a teñirse también de los colores frenteamplistas.
El primer golpe fue el paso al costado explícito de la candidata a la vicepresidencia por el Frente Amplio, Carolina Cosse, que en la campaña por la habilitación del plebiscito había acompañado la causa. Amparada por la “libertad de acción” votada por la Mesa Política del partido, la exintendenta de Montevideo había evitado expresarse sobre la instancia de octubre pero, ante la firme postura de Yamandú Orsi al respecto, y para evitar mayores críticas y especulaciones, confirmó que no votará por la reforma debido a la falta de “consensos colectivos”.
Si bien el tema quedó zanjado para la fórmula frenteamplista, que lleva adelante una campaña más bien de perfil bajo, ahora un grupo de 111 economistas y profesionales relacionados con la coalición de izquierda —algunos de los cuales tuvieron, incluso, cargos en los gobiernos del FA— lanza este jueves un portal llamado Frenteamplistas por el No, en el que concentran los argumentos para expresarse en contra de esta pretendida enmienda constitucional en materia de seguridad social.
Según el documento publicado por este grupo —entre cuyas firmas se encuentran las de Mario Bergara, Gabriel Oddone, Fernando Calloia, Fernando Lorenzo, Gustavo Viñales, Germán Deagosto, Pablo Ferreri, Álvaro García, Bruno Gili, Gabriela Mordecki, Jimena Pardo, Santiago Soto, Jorge Polgar y Martín Vallcorba—, la reforma “tendría consecuencias injustas y regresivas, y generaría enormes riesgos para la economía uruguaya”.
La alarma desde los sectores financieros
Asimismo, desde círculos relacionados con los negocios, Leonardo Isoardi, socio director de la consultora CPA Ferrere, declaró al semanario Búsqueda que, de cara al 27 de octubre, este plebiscito “es la incertidumbre”. “Se está expectante de cómo esto, que es transversal a todo lo demás, impacta sobre esos pilares que ya estaban firmes” en materia de política en Uruguay, al punto de haberse convertido en “consensos”.
Por su parte, el gerente del Área de Gestión de Patrimonios en el Banco HSBC, Carlos Saccone, aseguró que, a pesar de la “baja probabilidad de ocurrencia”, la aprobación del plebiscito es “el mayor riesgo que enfrenta el país desde la crisis de Argentina a principios de siglo”, en términos económicos-financieros: “Descalabra muchas cosas, entre ellas el tipo de cambio, que fácilmente puede irse a 50 pesos en el muy corto plazo”.
En tanto, el constitucionalista Martín Risso también hizo nuevos presagios en caso de que prosperen los cambios en la seguridad social que se someterán a plebiscito, y proyectó dos momentos “muy complicados” para Uruguay: el primero, cuando los trabajadores comiencen con las demandas al Estado por los ahorros que están en las AFAP y que, según la propuesta, deben pasar a un fideicomiso en la órbita del Banco de Previsión Social (BPS), lo que afectará fuertemente el grado inversor y la confianza del país; y el segundo, cuando estén las sentencias de condena de esos juicios, que el Estado no podrá pagar. “Vamos a un default seguro”, dijo el abogado.
Los argumentos contra el plebiscito
La habilitación del plebiscito por parte de la Corte Electoral —en tanto el PIT-CNT reunió firmas equivalentes a un 10% del padrón electoral— reflotó la serie de críticas importantes que especialistas venían señalando en cuanto a las consecuencias económicas que la aprobación de la reforma constitucional pretendida por la central sindical generaría en el país. En ese sentido, entre los puntos de alarma se señalaron, por ejemplo, la posible pérdida de bonificaciones para los jubilados, en términos de la rentabilidad lograda a través de los depósitos en las AFAP.
A un nivel más macro, se apuntó a un fuerte incremento del gasto público para afrontar el aumento instantáneo de las jubilaciones —tanto por los montos, que se anclarían al salario mínimo nacional, como por la baja de la edad jubilatoria— y, por lo tanto, la necesidad de subir impuestos para cubrir ese mayor presupuesto previsional. También preocupa la eventual pérdida del grado inversor de Uruguay debido a la menor confianza en la seguridad jurídica —lo que, a su vez, dificultaría el acceso a financiamiento internacional para el país y un mayor costo crediticio—, así como la posibilidad de que jubilados y pensionados le hagan juicio al Estado por la confiscación de los ahorros administrados en las AFAP.
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