Los sectores del Frente Amplio inician la batalla por la candidatura en Montevideo

Los resultados electorales delinearon el mapa de fuerzas internas con un MPP fortalecido, un seregnismo golpeado y un "cossismo" que buscará resistir en la capital.

Los sectores del Frente Amplio comienzan a delinear su estrategia por la Intendencia de Montevideo, de cara a las elecciones departamentales.

Foto: @Frente_Amplio

La inmediatez y la definición final del balotaje 2024, en el que competirá la fórmula Yamandú Orsi - Carolina Cosse por el Frente Amplio (FA), comienza a dejar espacios en la coalición de izquierda para que los diferentes sectores ya piensen en las candidaturas para las elecciones departamentales y, sobre todo, para la Intendencia de Montevideo: el Movimiento de Participación Popular (MPP) parte con ventaja, pero el sector de Cosse no dejará que tenga la última palabra en su bastión con una nueva interna que se abre.

La fórmula presidencial está más que consolidada y, luego de haber obtenido un 44% de los votos en octubre, el objetivo inmediato es ganar el balotaje. Con ello, claro, el gobierno. Pero eso no impide que, en paralelo, el Frente Amplio ya empiece a definir su estrategia de cara a las elecciones departamentales del próximo año, con la mira especialmente puesta en el principal bastión de la izquierda: la capital, Montevideo.

Lo cierto es que aquí se abrirá una nueva batalla al interior del FA. Y en ella incidirán fuertemente los resultados de las elecciones generales del pasado 27 de octubre, que tuvo como mayor sorpresa la excelente performance del MPP con la lista 609 al Parlamento: logró 9 de los 16 senadores que obtuvo el FA —Alejandro Sánchez, Blanca Rodríguez, Cristina Lustemberg, Daniel Caggiani, Sandra Lazo, Sebastián Sabini, Cecilia Cairo, Alfredo Fratti y Sandra Etcheverry—; y 36 de los 48 diputados, es decir que tiene tres de cada cuatro legisladores frenteamplistas.

Este escenario en el que no solo el sector de José Mujica y Orsi tendrá la mayoría parlamentaria indiscutida dentro del Parlamento, sino en el que la lista 609 fue la más votada dentro del Frente Amplio en 17 departamentos —sólo perdió con el Partido Comunista (PCU) en Durazno y con la alianza de La Patriada y Asamblea Uruguay en Treinta y Tres—; condiciona fuertemente el reparto de fuerzas en la negociación interna hacia las candidaturas departamentales, al punto de que el MPP analiza tener un candidato propio.

El revés para Bergara y la presión para Cosse

El resultado electoral, en contrapartida, no fue bueno para Mario Bergara y los seregnistas. El exsenador tiene intenciones de ser candidato a la Intendencia de Montevideo —al punto de que resignó a no asumir cargos en el eventual Poder Ejecutivo frenteamplista, tal y como transmitió a sus allegados y pudo saber Ámbito —; y aspiraba a tener el respaldo del MPP para su candidatura. El reparto de votos pone en duda este escenario.

Por un lado, por el buen desempeño de la lista 609 y la posibilidad de que presenten su propio nombre para la jefatura departamental de la capital. Pero, por el otro, por la mala elección que hizo Seregnistas —nucleando a Fuerza Renovadora, Asamblea Uruguay y el Partido Demócrata Cristiano—: la lista encabezada por el mismo Bergara y por Liliam Kechichian votó peor que en 2019 (17%) y obtuvo solo el 8% de los votos frenteamplistas. Esto significa también que, además de perder dos bancas en el Senado y otras dos en la Cámara baja, el sector perdió peso dentro de la coalición de izquierda.

De todos modos, el camino no está necesariamente allanado para el MPP: el “cossismo” —como se refieren algunos militantes a los sectores que apoyan a Cosse— no dejará Montevideo tan fácil sin dar su propia batalla, y ya piensa en su propia candidatura para la que, según supo Ámbito, ya se menciona a la actual directora de Cultura, María Inés Obaldía.