Una dura caída: el rapero que nadaba en millones de dólares, pero perdió todo en tiempo récord

Este rapero supo tener millones gracias a sus grandes éxitos, pero una serie de malas decisiones lo llevaron a la bancarrota.

Mc Hammer y una fortuna de millones de dólares que no fue bien aprovechada.

Si bien hoy son muchos los artistas que se pelean por el trono y buscan sacar un éxito detrás de otro, hay quienes han logrado tocar el cielo con las manos con una sola canción y así han generado millones de dólares gracias a la música. Pero así como están en la cima, una serie de malas decisiones pueden complicarles la vida.

Stanley Kirk Burrell, mejor conocido como MC Hammer, tuvo un éxito que al día de hoy es reproducido hasta el cansancio como "U Can't Touch This". Este rapero consiguió vender más de 50 millones de discos, pero no supo mantenerse económicamente y gracias a una serie de despilfarros, cayó en bancarrota.

Mc Hammer disfrutó sus millones, pero no pudo administrarlos como corresponde.

Miles de millones muy rápido: el increíble ascenso de Mc Hammer

En febrero de 1990, el álbum "Please, Hammer, Don't Hurt 'Em" llegaba a lo más alto de las listas de ventas y lo convertían en el rey del hip hop en ese entonces. Más de diez millones de copias vendidas, giras a lo largo y ancho del mundo y contratos comerciales con marcas relevantes como lo era el caso de Pepsi. El músico había cosechado sumas cercanas a los 50 millones de dólares.

Una deuda de millones y una lenta recuperación

En la cima empieza la caída para Mc Hammer, quién no supo invertir nada de lo que había conseguido. Para empezar, el músico contaba con más de 200 asistentes, muchos de ellos aduladores, que le costaban un millón de dólares mensuales. A esto hay que sumarle que su mansión contaba con pistas de tenis y baseball, un auditorio, garaje para más de 15 autos y un estudio de grabación. Pero eso no era todo, su hogar también contaba con puertas de oro y suelos de mármol.

Pero eso no fue todo, ya que el rapero compró veinte caballos de carrera y les construyó un establo de lujo similar a su casa. A su ya costosa colección de autos de lujo le sumó dos helicópteros y un jet privado, pero su despilfarro ni siquiera terminaría allí.

Produjo una película protagonizada por él mismo y en la cuál él personaje interpretaba a un músico que desbarataba una banda dedicada al narcotráfico. Para colmo, dos dramas judiciales por los derechos de su tema, terminaron por llevarlo a una bancarrota que lo hizo adeudar 13 millones de dólares.

Hoy por hoy, Mc Hammer no vive una vida de lujos, pero de a poco intenta dejar atrás sus pésimas decisiones y, si bien no planea volver al mundo de la música, intenta tener una vida qué tranquila y muy alejada de los gustos extravagantes que se daba cuando tenía mucho dinero.