Claldy niega despidos antisindicales mientras trabajadores inician huelga de hambre

La empresa afirma que la Justicia avala la reestructura ante acusaciones de despedidos que profundizan las medidas de lucha frente a la Torre Ejecutiva.

La empresa Claldy rechazó que los despidos efectuados hayan sido de carácter antisindical, mientras que dos de los ocho trabajadores cesados inician este miércoles una huelga de hambre, para pedir su reintegro, en una carpa instalada frente a la Torre Ejecutiva, respaldada por la Federación de Trabajadores de la Industria Láctea (FTIL) y el PIT-CNT.

El presidente de firma, Daniel Reimer, sostuvo en declaraciones a Radio Monte Carlo que existe una sentencia judicial firme que exonera a la empresa de cualquier conducta antigremial. “La Justicia se pronunció y dijo que la reestructura no es antisindical, sino necesaria. Nos paramos bien firme en esa sentencia”, afirmó.

Reimer señaló que la compañía está habilitada a realizar las reestructuras que considere necesarias para “asegurar la continuidad operativa y la sustentabilidad de todos los puestos de trabajo vigentes”. Agregó que la empresa no tiene problemas con una actividad sindical “que aporte y sume ideas”, pero rechazó las acusaciones de persecución gremial.

El presidente de Claldy afirmó, además, que la empresa presentó “diversas alternativas” para reinsertar a los trabajadores en el mercado laboral: “Ofrecimos la posibilidad de emplearse en servicios tercerizados, con el mismo ingreso, y hablamos con los proveedores para que los tomaran como dependientes. Les dimos opciones concretas, pero no las consideraron interesantes. La única forma que entienden es volver a Claldy”.

Reimer sostuvo que la empresa mantiene la voluntad de encontrar una salida negociada. “Claldy quiere ser parte de la solución, no nos causa ninguna gracia que un trabajador quede sin su fuente de ingresos. Hoy la empresa y el Ministerio de Trabajo estamos en la misma línea, pero la otra parte entiende que sigue siendo insuficiente”, añadió.

Huelga de hambre y carpa frente a la Torre Ejecutiva

Tras varias instancias de negociación en el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS), y luego de reuniones sostenidas lunes y martes, no se alcanzó un acuerdo entre la FTIL, Claldy, la Cámara de la Industria Láctea (CILU) y los trabajadores despedidos.

Ante la falta de acuerdo, al menos dos de las personas cesanteadas inician este miércoles una huelga de hambre, mientras desde la FTIL se monta una carpa en apoyo a los trabajadores frente a la Torre Ejecutiva. Enrique Méndez, dirigente de la FTIL, explicó que se consideraron “diferentes opciones y propuestas alternativas” para lograr la reincorporación parcial de los despedidos, pero aseguró que la empresa “solo aceptaba si se desistía del reclamo por despido”.

Para el dirigente, la posición empresarial “reafirma la conducta antisindical”, algo que, según dijo, también señalaron el PIT-CNT y el propio MTSS. Acerca de la carpa a instalarse en el entorno de la Torre Ejecutiva, dijo que “es de la FTIL” y para respaldar “a los compañeros, tanto a los que harán la huelga de hambre como a los que no”. Méndez destacó que la FTIL y los trabajadores continúan abiertos a la negociación, aunque reconoció que “el relacionamiento con la empresa está más deteriorado que nunca”, en declaraciones a La Diaria.

Por su parte, la directora nacional de Trabajo, Marcela Barrios, señaló que desde el momento de los primeros despidos —originalmente 32— el MTSS ha facilitado múltiples instancias de diálogo. “Fueron varias rondas de negociación, hasta llegar a los ocho trabajadores que hoy siguen en conflicto”, explicó. Barrios indicó que las negociaciones de los últimos días fueron extensas —la del lunes duró alrededor de cinco horas— y que “se buscaron distintas alternativas, pero ninguna dejó satisfechas a las dos partes”. Destacó, además, la disposición del PIT-CNT y de la CILU, “quienes cooperaron y ayudaron a buscar soluciones”.