El presidente de la Cámara Uruguaya de la Construcción (CCU), Alejandro Ruibal, dialogó con Ámbito.com de varios temas. Más allá del fin de las obras de UPM 2, apuesta a que el sector se mantenga en el buen nivel actual en base a la buena cantidad de inversiones inmobiliarias y a una necesaria reactivación de la obra pública.
La Cámara de la Construcción advierte de casos de dumping de empresas argentinas
Su presidente, Alejandro Ruibal, analizó los efectos de la obra pública y el fin de UPM 2 en el sector, así como del próximo Consejo de Salario.
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Ruibal, que asumió la CCU en febrero pasado, es también director ejecutivo de la empresa Saccem y dirigente de Peñarol. Dijo que quiere darle un impulso a la Cámara de la Construcción que vaya más allá de lo empresarial, con una mirada social y con buena relación con los trabajadores.
- ¿Habrá una desaceleración del sector de la construcción tomando en cuenta el fin de las obras de UPM 2?
- La planta de UPM 2, como las anteriores plantas de celulosa pero en particular esta que ha sido muy grande, generó una cantidad muy importantes de empleos. Fue casi durante casi tres años en el centro del país, como obra de infraestructura y otras como el ferrocarril y obras viales que también generaron empleos que están terminando. Ahí hay un impacto fuerte en el empleo del orden de 10.000 puestos de trabajo.
La buena parte de esto es que el impacto se amortigua con la construcción de viviendas en algunas zonas en particular, sobre todo vivienda privada, junto a los planes del Ministerio de Vivienda (MVOT) como la vivienda promovida y también obra vial. Hay una caída importante de puestos de trabajo de 62.000 activos a unos 52.000 aproximadamente, que igual es un número muy alto.
- ¿Se puede decir que a nivel del este del país hay un “boom” de construcción, en el sector inmobiliario y eso también ayuda a contrarrestar este efecto?
- No estoy muy a favor de concepto “boom”, pero sí te diría que lo hay en algunos puntos del país. En el este, yo creo que lo que hay es un pico de construcción, pero creo además que sigue habiendo un buen ritmo de construcción en vivienda y edificios en algunas zonas de Montevideo, como los accesos por el este. Pero bueno, en general el sector vivienda en Montevideo, Canelones, Maldonado, ha tenido una actividad muy importante en estos años.
- A nivel de obra pública, ¿ que desafíos importantes hay? ¿Han aparecido empresas extranjeras interesadas?
- El Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP) viene con muy buena actividad y muy buen nivel de inversión. Fuera de eso está un poco rezagada la obra pública, esperando algunos proyectos, como los vinculados al agua potable y saneamiento que se han anunciado y que estamos esperando que se concreten. Hay que tomar en cuenta que la inversión de las intendencias es muy dispar. Canelones al igual que Maldonado han invertido, pero Montevideo tiene un nivel bastante bajo de inversión en obra pública.
Siempre han existido empresas extranjeras trabajando en Uruguay porque sé es muy abierto para recibirlas y presentarse a licitaciones. En ese sentido lo que nos preocupa es que a veces algunas empresas de Argentina que tienen en sus costos fijos, estructuras que con el tipo de cambio tienen una ventaja importante como las maquinarias por ejemplo , entonces ese es un tema que nos genera un poco de “dumping” hacia nuestras empresas.
- ¿Qué pasa con la competitividad del tema del dólar? ¿Los afecta y de qué manera?
- Ese es un tema delicado, tal vez no tanto como en otros sectores. Los que construyen edificios venden en dólares los departamentos, pero estaban en pesos cuando se construyó la obra. Entonces eso, hasta cierto punto, se amortigua por los propios números del negocio, pero hay negocios que empiezan a debilitarse y a no cerrar sus cuentas.
Y después también muchas veces, por ejemplo, clientes extranjeros que vienen a instalar inversiones tratan de tener contratos en moneda extranjera como el dólar y el euro, pero los nuestros son básicamente en pesos, entonces hemos tenido impacto.
- Respecto a la negociación colectiva, ¿qué expectativas hay para esta ronda de Consejo de Salarios? ¿Hay expectativa de que lo salarial acompañe a la inflación?
- Recién empezamos a hablar, tuvimos un par de reuniones. Es muy prematuro, pero el sector de la construcción es el sector que no tuvo pérdida de salario real en este periodo y la intención es seguir así. Pero veremos, recién empezamos a sentarnos en la mesa, hay una cantidad de aspectos más allá de lo salarial. Con el Sunca (Sindicato Único Nacional de la Construcción y Anexos) tenemos nuestras diferencias, pero también puntos de acuerdo y discutiremos y trataremos de acordar.
- ¿Cree que va a ser un año especialmente de conflictividad?
- Yo espero que no. Eso no le sirve a nadie. Ni a las empresas , ni al país ni a los trabajadores. Cuando se pueden lograr acuerdos maduros y cuando tenemos antecedentes de lograrlos y proteger las fuentes de trabajo, se puede.
- ¿Están trabajando en aspectos que tienen un poco más alla de lo económico?
- Sí, es verdad. nosotros estamos trabajando, levantando también una bandera que el Sunca ha levantado, que es el tema del control de las adicciones ya sea para trabajadores y la familia de trabajadores de la construcción.
En eso estamos de acuerdo y lo hemos puesto en nuestra agenda. Entendemos que tenemos que ayudar en eso. Tenemos varios años de experiencia de trabajo conjunto con los trabajadores, en los distintos fondos que tenemos. Algunos de los fondos para ayudar con los útiles escolares de los hijos de los trabajadores que funciona muy bien lo hemos construido en conjunto. Eso creo que es un ejemplo que nuestra industria puede compartir con otras. No son proyectos para la tribuna, sino tratar de hacer cosas que realmente tengan este efecto.
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