Una copa en el Vaticano

Mauro Cetto, a punto de embarcar. El zaguero de San Lorenzo fue elegido por sus compañeros (junto con Torrico) para representar al plantel en la audiencia con el papa Francisco. El Sumo Pontífice cumple 77 años y los va a festejar con el trofeo de campeón de su equipo preferido.

Cumpliendo una promesa, la Copa del Torneo Inicial ganada por San Lorenzo viajó al Vaticano, para los festejos de los 77 años del papa Francisco.

Una delegación compuesta por el presidente, Matías Lammens; el vicepresidente, Marcelo Tinelli; el mánager general, Bernardo Romeo; y los jugadores Sebastián Torrico y Mauro Cetto viajó a Italia con el trofeo para festejar el campeonato con Jorge Bergoglio, el papa Francisco, un fanático de San Lorenzo que tendrá ese regalo como uno de los más importantes en su cumpleaños 77.

El Papa les daría audiencia entre hoy y mañana, teniendo en cuenta sus obligaciones.

Lammens habló antes de partir y explicó: "El año pasado, San Lorenzo era todos los días una mala noticia. Tuvimos un chico apuñalado de las inferiores, empleados de paro, siempre un problema. Al club había que atenderlo personalmente, económicamente. Era como un enfermo terminal al que había atenderlo día a día. Pero San Lorenzo sabe mucho de esta historia de renacer".

Entre otras cosas, Lammens definió a su vicepresidente, Marcelo Tinelli, y expresó: "No es un artista, es un loco más de San Lorenzo. Todas las cosas que hacemos parecen locuras, pero las hacemos con mucho amor".

Con un toque místico, Lammens expresó: "Ganamos el campeonato con 33 puntos, la edad de Cristo; cómo no se lo vamos a dedicar al papa Francisco. El viaje era algo que teníamos pensado con Tinelli, desde hace una semana, pero no dijimos nada porque no hay que festejar antes de tiempo".

Por su parte, el arquero Sebastián Torrico, el héroe del partido con Vélez, habló de su tapada final ante Agustín Allione, que le aseguró el título a San Lorenzo: "Sin dudas fue la tapada más importante de mi carrera. La tapada de mi vida. Tuve suerte y quizás una mano de Dios".

El arquero mendocino dijo: "Siempre soñé con jugar en un equipo grande y quedar en la historia. Por eso es una gran alegría".

Por su parte, Mauro Cetto expresó: "Vale la pena postergar las vacaciones para ir a ver al Papa. Es una oportunidad que espera todo el mundo, y San Lorenzo nos dio la oportunidad de cumplirla y no la vamos a desaprovechar".