El presidente estadounidense, Donald Trump, afirmó que no cree que vaya a ser necesaria una nueva prórroga de la fecha del 9 de julio para la imposición de aranceles a los países que no hayan llegado a un nuevo acuerdo comercial con Estados Unidos.
El mundo en vilo por los aranceles de Donald Trump: avanzan las negociaciones mientras se acerca la fecha límite
El presidente de EEUU ratificó el deadline del de julio para llegar a un acuerdo. Hay puntos clave, como el sector automotriz, las industria metalúrgica, los productos de consumo masivo y las tecnológicas.
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Trump pretende que los arannceles queden en su mayoría en un 25%.
"No creo que vaya a necesitarlo", ha afirmado durante una entrevista con Fox News grabada el viernes y emitida este domingo. "Podría, no pasa nada", ha añadido inmediatamente más en la línea con las declaraciones públicas del pasado viernes en las que dijo que podía hacer "lo que quiera" con el plazo.
"Me gustaría recortarlo. Me gustaría enviar cartas a todos: 'felicidades, vas a pagar el 25 por ciento'", dijo durante una rueda de prensa el viernes.
En la entrevista del domingo ha repetido la misma idea. "Hemos llegado a acuerdos, pero me gustaría enviarles una carta, una carta muy bonita diciendo 'felicidades, vamos a permitirte comerciar con los Estados Unidos de América y vas a pagar aranceles del 25 por ciento, o del 20 por ciento, o del 40 o del 50 por ciento'. Prefiero hacer eso", ha apuntado.
Trump ha subrayado que estas cartas son el final de la negociación y que éstas serán enviadas "muy pronto". Así, ha puesto como ejemplo a Japón. "Querido señor Japón. Aquí va. Vas a tener que pagar un arancel del 25 por ciento por tus coches", planteó.
Trump se ha referido ya anteriormente a las cartas mencionadas los días 16 de mayo y 11 de junio y en ambos casos las misivas iban a ser enviadas en entre dos y tres semanas, aunque finalmente no se han materializado.
Un punto de fricción clave: los autos japoneses
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dejó claro que evalúa sostener un arancel del 25% sobre los automóviles importados de Japón si no se alcanza un nuevo acuerdo comercial. La amenaza llega mientras se agota el tiempo para negociar: si no hay avances antes del 9 de julio, entrarían en vigor más gravámenes generales que podrían profundizar la tensión entre ambos países.
"Así que no les vendemos vehículos a Japón. No aceptan nuestros autos, pero nosotros sí millones de los suyos. No es justo", criticó Trump en Fox News, insistiendo en que Japón podría equilibrar la balanza comprando más petróleo u otros bienes estadounidenses.
¿Por qué EEUU apunta al sector automotriz japonés?
Japón mantiene uno de los mayores superávits comerciales con EE.UU., que en 2024 llegó a 8,6 billones de yenes (unos u$s59.300 millones). El 82% de ese superávit se explica por autos y autopartes, un sector vital para la economía nipona y un objetivo prioritario en la estrategia proteccionista de Trump.
El déficit comercial de EE.UU. con Japón es actualmente el séptimo más grande a nivel bilateral, detrás de socios como China o México.
Negociaciones críticas y riesgo de recesión para Japón
Ryosei Akazawa, principal negociador japonés, se reunió la semana pasada en Washington con el secretario de Comercio Howard Lutnick. Aunque las conversaciones fueron calificadas de "fructíferas", todavía no hay señales claras de un pacto que evite los aranceles extra.
Tokio insiste en que los gravámenes sectoriales sobre autos son inaceptables. Argumenta que la industria automotriz japonesa invirtió más de u$s60.000 millones en EE.UU. y sostiene unos 2,3 millones de empleos locales. Sin acuerdo, la economía japonesa —que ya se contrajo en el primer trimestre de 2025— podría entrar en recesión técnica.
Reino Unido consigue alivio para autos y sector aeroespacial
En tanto, a partir de este lunes, los autos fabricados en el Reino Unido ingresarán a EEUU con un arancel del 10%, frente al 25% que Donald Trump impuso a otros países, gracias a un nuevo acuerdo económico entre Washington y el primer ministro británico, Keir Starmer.
También se eliminaron los aranceles del 10% para bienes del sector aeroespacial, beneficiando a gigantes como Rolls Royce Holdings plc. Según el gobierno británico, esta rebaja salvará miles de empleos y protege dos industrias clave para la economía del país.
Jaguar y Rolls Royce, entre los principales beneficiados
El nuevo arancel reducido aplica a una cuota anual de 100.000 autos británicos, lo que favorece a marcas como Jaguar Land Rover frente a competidores de Japón o la Unión Europea, que siguen pagando tarifas más altas. Sin embargo, la tasa sigue siendo más elevada que los niveles pre-Trump, cuando no existía ese gravamen.
“A partir de hoy, nuestras industrias automovilística y aeroespacial de categoría mundial verán reducidos sus aranceles, salvaguardando industrias clave”, celebró Starmer en un comunicado oficial.
El acero, el punto más difícil
Pese a este avance, Londres y Washington no lograron destrabar la rebaja arancelaria para el acero británico, que continúa con una tarifa del 25% aunque Reino Unido había anunciado un principio de acuerdo para reducirla a cero. El sector siderúrgico local sigue reclamando un alivio para mantener su competitividad.
El departamento de negocios británico admitió que el acero es el tramo más complejo de la negociación y que seguirán las conversaciones para alcanzar un arancel cero, sin precisar plazos.
Un acuerdo pionero para Londres
El Reino Unido es el único país que consiguió un trato preferencial con la administración Trump, algo que podría servir como modelo para otros países que buscan alivios en sus propias disputas comerciales con EE.UU.
Para analistas, el fracaso parcial en el acero envía una señal de advertencia a otros socios que esperan cerrar pactos de reducción arancelaria antes de la entrada en vigor de nuevas tasas globales.
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