29 de septiembre 2020 - 19:22

Buscan adaptar modelo de EEUU para decidir regreso a escuelas

El Ministerio de Educación nacional presentó un esquema de indicadores epidemiológicos para ciudades de más de 500 mil habitantes. Exploran "criterios objetivos" para medir riesgos de contagio al evaluar retorno. Iniciativa avanza tras pulseada con CABA.

El ministro Nicolás Trotta, durante el encuentro multisectorial virtual de este martes.

El ministro Nicolás Trotta, durante el encuentro multisectorial virtual de este martes.

El Ministerio de Educación nacional presentó este martes “un modelo de indicadores epidemiológicos” para determinar de manera “objetiva” el nivel de riesgo al que se expone la comunidad educativa ante un potencial retorno a clases presenciales en ciudades de más de 500 mil habitantes, con la mirada puesta en evaluar el momento de activar ese regreso y minimizar los contagios.

A través de ese modelo apuntan a “establecer parámetros para la toma de decisiones” en grandes urbes. La iniciativa propone una escala de riesgos -bajo, medio o alto-, que serán evaluados por la autoridad sanitaria y de educación de cada jurisdicción.

En esa línea, este miércoles analizarán -en una mesa de trabajo con representantes jurisdiccionales y especialistas- la adaptación del indicador del Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos a la realidad local, para que -afirmaron- “sea la ciencia la que se expida respecto del momento epidemiológico que atraviesan las grandes ciudades de Argentina para el regreso a las actividades escolares”.

La ingeniería presentada por Educación - en articulación con la cartera de Salud y el multisectorial Consejo Asesor- es un coletazo de la pulseada con CABA frente al intento del porteño Horacio Rodríguez Larreta de plasmar algún grado de presencialidad escolar.

Pero la avanzada es más abarcativa y alcanza además a enclaves como partidos del Gran Buenos Aires, el Gran La Plata, Mar del Plata, Gran Córdoba, Gran Santa Fe, Gran Rosario, Gran Mendoza, Gran San Juan, Gran Salta y Gran Tucumán - Tafí Viejo.

En las grandes ciudades la situación se complejiza, por lo tanto presentamos nuevos indicadores que permitan medir los riesgos de contagio y establecer parámetros objetivos para abordar con responsabilidad el momento adecuado del retorno seguro a las actividades escolares”, aseguró el ministro de Educación nacional, Nicolás Trotta.

El indicador deberá ser refrendado por el Consejo Federal de Educación, que integran Nación y todas las jurisdicciones. Cada indicador o combinación de indicadores -remarcaron- no debe usarse de forma aislada y deberá considerar, por caso, medida de transmisión comunitaria, parámetros para establecer si la escuela puede garantizar la seguridad sanitaria y la disponibilidad de camas hospitalarias, entre otros aspectos.

En la previa, desde el Palacio Sarmiento aseguraron a Ámbito que Trotta propuso avanzar en la confección de un “indicador objetivo” para poder evaluar, sin contaminaciones de corte “discursivo” o “político”, si un potencial regreso a las clases presenciales en grandes urbes es seguro o no.

Fue en el marco de la discusión con la ministra de Educación porteña Soledad Acuña, quien impulsa un regreso acotado a la presencialidad para 6.500 alumnos sin vinculación pedagógica como primer capítulo. Y, puntualmente, tras un encuentro del que participaron además el ministro de Salud, Ginés González García, y su par de CABA, Fernán Quirós.

Antes de la multisectorial cita virtual de este martes -incluyó a provincias, ciudades y gremios- desde filas porteñas brotó la disconformidad. “Trotta cerró un indicador por su cuenta, cuando en realidad dijo que lo iba a armar con la Ciudad para futuras aperturas; lo terminó decidiendo unilateralmente”, cuestionaron. Pero primó el hermetismo tras el encuentro.

Pese a los esfuerzos iniciales y luego de varios retrocesos por los contagios, hoy sólo sobreviven experiencias acotadas de regreso a escuelas en Formosa y La Pampa. El próximo lunes, en tanto, seguirá esa senda San Luis.

Días atrás, y en el marco de un duro comunicado conjunto en en el que advirtieron su deseo de regresar a las aulas "pero no de cualquier modo", con el Gobierno porteño como destinatario, los ministros de Educación de 17 provincias abrieron un guiño a potenciales correcciones en el protocolo sanitario de retorno a clases presenciales, aprobado por todas las administraciones y que incluye una orden difícil de cumplir en el corto plazo: que haya baja o nula circulación viral.

En esa línea, destacaron su intención de “acompañar al Ministerio de Educación nacional en todas aquellas iniciativas que (les) permitan contar con estándares epidemiológicos precisos para que la comunidad educativa tenga mayor previsibilidad de las condiciones en las que es posible comenzar a transitar la vuelta a clases presenciales”.

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