12 de diciembre 2025 - 13:40

Europa endurece restricciones y tensa el acuerdo Mercosur-UE, ¿mala noticia u oportunidad para Uruguay?

Desde Cancillería insisten en que es un "tema interno europeo", pero pone contra las cuerdas al bloque regional. ¿Qué pasa con el principal afectado, el agro?

Uruguay puede estar frente a una oportunidad en momentos donde Europa endurece las restricciones y tensa el acuerdo Mercosur-UE.

Uruguay puede estar frente a una oportunidad en momentos donde Europa endurece las restricciones y tensa el acuerdo Mercosur-UE.

El Mercosur está “con la lapicera abierta” para firmar el tan esperado acuerdo comercial con la Unión Europea (UE), pero en la previa de lo que será el Consejo del bloque europeo y la posterior cumbre de Jefes de Estado del organismo sudamericano en la que se sellaría el tratado, desde el Viejo Continente surgió una nueva salvaguarda agrícola que tensa las cuerdas: ¿qué significa esto para las negociaciones y, sobre todo, para Uruguay?

Si todos los caminos conducen a Roma, todos parecen conducir también a que Foz de Iguazú sea escenario, el próximo sábado 20, de la firma del acuerdo Mercosur-UE. Sin embargo, hasta último momento hay tensión, porque desde Europa incorporaron una enmienda a la salvaguarda agrícola que refuerza los controles sobre los productos sudamericanos y reduce los plazos y el nivel de crecimiento del comercio agrícola necesarios para que se active la misma.

Este escenario de salvaguardas reforzadas —y de decisiones que, a simple vista, se aparecen como unilaterales— tiene lecturas distintas, aunque con puntos en común. Desde Cancillería, relativizaron el impacto que pueda tener esta novedad: “no hay trabas porque el acuerdo está cerrado y no se vuelve a negociar, es un tema interno europeo”, afirmaron a Ámbito.

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De hecho, la disposición busca convencer a Francia —principal opositor del tratado— de que vote a favor, para no seguir acentuando la fragmentación interna europea en un contexto geopolítico cada vez más complejo para el Viejo Continente. Como señaló el doctor en Relaciones Internacionales, Esteban Actis, en sus redes sociales, el rechazo francés resultaría en “la primera gran decisión comercial de la UE sin el apoyo de París” y una señal de alerta a la integración.

Una posición incómoda para el Mercosur

Pero, más allá del trasfondo europeo, lo cierto es que también aumenta las restricciones a los países sudamericanos y “baja aún más la ambición a un acuerdo donde la apertura en la agricultura estaba muy limitada”, apuntó el doctor en Relaciones Internacionales y director del Instituto de Negocios Internacionales (INI-UCU), Ignacio Bartesaghi.

Además, “pone la pelota del lado de América Latina”: “El Mercosur no va a tener más remedio que aceptar”, consideró, en referencia a la propia importancia geopolítica que tiene el tratado, sobre todo para Lula da Silva, que busca que el cierre definitivo sea durante la presidencia pro témpore en Brasil.

Si bien el bloque regional podría pedir algo a cambio del endurecimiento de la salvaguarda e, incluso reabrir las negociaciones, no es algo que se vea muy probable, en línea también con lo expresado por Cancillería. Para Bartesaghi, “es una mala noticia para el Mercosur porque debió tener más tiempo para negociarla y discutirla con la Unión Europea, pero el apuro y los tiempos para firmar —que tiene que ser este año porque, si no, el impacto negativo va a ser muy fuerte— llevó a que se haga de esta forma, que no es la mejor”. Todos necesitan “la foto”.

“Es el escenario que tenemos, y va a ser mejor firmar el acuerdo, aunque tengamos que aceptar esta salvaguarda agrícola, que no firmarlo. Ya está cerrado el partido”, afirmó el especialista, resumiendo lo que parece ser, a nivel general, la postura —”incómoda”— en el Mercosur.

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La implementación de la salvaguarda agrícola busca que Francia apruebe el acuerdo Mercosur-UE.

La implementación de la salvaguarda agrícola busca que Francia apruebe el acuerdo Mercosur-UE.

¿Una ventaja adicional para Uruguay?

Desde el agro, el principal afectado por el endurecimiento de los requisitos europeos, no ven la noticia como un factor tan relevante para el resultado final del acuerdo Mercosur-UE y su impacto sobre el sector. “Habla de una negociación interna dentro de la propia Unión Europea, tiene que ver un poco con los requisitos de Francia para apoyar el acuerdo y, en definitiva, genera más restricciones para que en Europa puedan acceder a productos que hoy, a nivel mundial, tienen una demanda muy importante”, consideró el presidente de la Federación Rural (FR), Rafael Normey, en diálogo con Ámbito.

Es más, en lo que respecta a las altas exigencias sobre los productos agrícolas —la “parafernalia de restricciones”—, “Uruguay está muy bien posicionado y no debería tener mayores problemas para llegar con los productos y acceder a los mercados”, si bien los demás países del Mercosur se enfrentarían a un escenario “un poco más complejo”. “En ese sentido, estamos un escaloncito por arriba de los otros socios”, señaló el dirigente agropecuario.

Para Normey, no hay dudas de que “va a ser una ventaja extra” para la producción nacional: “y lo tenemos claro y los países que nos compran también”. “Incluso a nivel de China empezaron algunas negociaciones o averiguaciones para saber cómo es esto de las normas europeas y cómo puede haber también opciones de nicho de mercado en uno de los países más grandes de nuestro mercado”, ejemplificó. Es que “basándose en esas exigencias europeas, también suma para generar nichos comerciales de alto valor” y “abre oportunidades para Uruguay, que ha hecho las cosas muy bien desde hace muchos años”.

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El endurecimiento de la salvaguarda agrícola puede ser una ventaja para Uruguay frente a sus socios del Mercosur.

El endurecimiento de la salvaguarda agrícola puede ser una ventaja para Uruguay frente a sus socios del Mercosur.

Según explicó, son iniciativas y avances que los productores implementan desde hace tiempo: “Lo que nos pasaba era que teníamos todas esas exigencias sin mayor ventaja a la hora de valorizar la producción. Ahora, todo ese esfuerzo está dando sus frutos, y todo eso por lo que sabíamos que en algún momento el mundo iba a pagar un plus de precio, se está logrando”.

De allí a que la expectativa por la firma del acuerdo Mercosur-UE sea grande, incluso cuando Europa “está siendo visto a nivel mundial cada vez como un mercado menos atractivo y menos interesante para explorar”. “El acuerdo es fundamental que se firme porque Uruguay necesita tener el mayor abanico posible de mercados abiertos para ir colocando los productos con el mayor valor posible en los nichos que mejor pagan”, concluyó Normey.

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