Ángel Di María se despidió del Benfica, tras la derrota del equipo portugués por 4-1 frente al Chelsea de Enzo Fernández, por los octavos de final del Mundial de Clubes en Charlotte, Estados Unidos en un encuentro que estuvo demorado casi dos horas por tormenta eléctrica.
Chelsea goleó a Benfica en un partido pleno de emociones y avanzó a cuartos del Mundial de Clubes
El elenco inglés se impuso 4-1 contres goles en el alargue. En tiempo regular igualaron 1-1: se suspendió por tormenta a minutos del final, continuaron tras dos horas y Di María anotó un penal a los 95
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Chelsea ganó un partido increíble y está en cuartos del Mundial de Clubes.
El "Fideo" había ilusionado a todos con un gol de penal a los 95 minutos que llevó el partido al alargue, pero la expulsión de Gianluca Prestianni y la categoría de los Blues fueron más. Así, el exjugador de la Selección argentina se despide de Europa y volverá a vestir la camiseta de Rosario Central, el club de sus amores.
En un encuentro que fue suspendido por casi dos horas cuando iban 86 minutos por tormentas eléctricas en el estadio Bank of America, los de Londres impusieron su categoría desde el inicio frente a los portugueses, que también contaron con los argentinos Nicolás Otamendi y Prestianni.
El primer tiempo fue parejo en todos los aspectos. Los dirigidos por Bruno Lage intentaron pegar desde el vestuario con Andreas Schjelderup y Di María como punta de lanza. Sin embargo, con el correr de los minutos, los de Lisboa perdieron la iniciativa y el partido se volvió monótono.
Ya en el complemento, las emociones llegaron a los 20. Reece James demostró toda su categoría al colocar un tiro libre desde el costado izquierdo, que agarró desprevenido al arquero Anatoliy Trubin, y el balón se coló en el primer palo. Chelsea pudo haber aumentado la diferencia, pero le anularon un gol a Liam Delap por fuera de juego.
A los 40 del segundo tiempo, el partido debió ser suspendido por tormenta eléctrica. El protocolo de seguridad ordenó que los futbolistas se retiren a los vestuarios, se evacúen las tribunas y esperar al menos, 30 minutos desde el último rayo antes de reanudar cualquier actividad. Así, volvieron y se jugó un partidazo.
Sobre el final, hubo show de Ángel Di María. Tras un centro del rosarino, Nico Otamendi cabeceó y Malo Gusto hizo un penal insólito al rebotar su mano con el balón. Allí apareció Fideo, con sangre fría y corazón caliente, para definir como los que saben para el festejo de las Águilas y de su esposa, Jorgelina Cardoso, con su hijas en la platea.
La expulsión de Prestianni en Benfica, complicó el trámite para los portugueses, que enfrentaban con 10 jugadores a uno de los animadores de la cita mundialista en el alargue. Y aunque los lusos tuvieron chances de lograr un segundo gol heroico, el equipo que dirige Enzo Maresca borró de un plumazo a su rival con tres goles en diez minutos: a los 107, Christopher Nkunku empujó la pelota para el 2-1, a los 114 fue Pedro Neto quien definió el 3-1 y Kiernan Dewsbury-Hall liquidó el partido para estampar el 4-1 a los 116.
De esta manera cerró Ángel Di María su increíble carrera en Europa, donde se convirtió en una estrella mundial. A pesar de su tristeza por quedar eliminado del Mundial de Clubes, donde por ahora es uno de los goleadores con 4 tantos, Fideo regresará al club de sus amores para cumplir el sueño de su vida: retirarse en Rosario Central. Mientras que Chelsea enfrentará por los cuartos de final a Palmeiras, el próximo 4 de julio en Filadelfia.
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