25 de febrero 2014 - 00:00

Rusia: “Lo de Kiev es un motín con kalashnicovs”

A más de dos días de su partida del poder, el expresidente derrocado Víktor Yanukóvich se encontraba en paradero desconocido. El nuevo Gobierno emitió una orden de captura en su contra por “asesinato en masa de civiles” durante la represión de las protestas de la semana pasada.
A más de dos días de su partida del poder, el expresidente derrocado Víktor Yanukóvich se encontraba en paradero desconocido. El nuevo Gobierno emitió una orden de captura en su contra por “asesinato en masa de civiles” durante la represión de las protestas de la semana pasada.
Kiev - Rusia cuestionó ayer la legitimidad y los "métodos dictatoriales" de las nuevas autoridades ucranianas, en momentos en que éstas emitieron una orden de arresto contra el destituido presidente Víktor Yanukóvich, un aliado de Moscú.

"Si tenemos en cuenta que el Gobierno son las personas que caminan por Kiev con máscaras negras y kalashnikovs, entonces será difícil para nosotros trabajar con un Gobierno de ese tipo", sentenció el primer ministro ruso Dmitri Medvédev. "Es una especie de aberración llamar legítimo a lo que en esencia es el resultado de un motín armado", agregó, en alusión a la Unión Europea, Polonia, Francia y Alemania, así como Estados Unidos, que reconocieron las decisiones del Parlamento ucraniano que derrocó al Yanukóvich y convocó a elecciones anticipadas para el 25 de mayo.

Por su parte, el Ministerio de Relaciones Exteriores ruso afirmó en un comunicado que la oposición ucraniana se orientó "hacia la represión de aquellos que no están de acuerdo mediante métodos dictatoriales y a veces terroristas" y denunció la abrogación de una ley que hacía del ruso la segunda lengua oficial en algunas regiones ucranianas. "Al invocar los 'intereses revolucionarios' se validan 'decisiones' y 'leyes', que buscan sobre todo perjudicar los derechos humanitarios de los rusos", señaló el texto.

Los temores por la integridad territorial de Ucrania se multiplican. Los occidentales temen sobre todo que la crisis de los últimos meses haya ahondado más la brecha entre el este rusófono y rusófilo, mayoritario, y el oeste nacionalista, donde se habla ucraniano.

Estados Unidos, por su parte, se abstuvo de respaldar plenamente al presidente interino, Alexander Turchínov, como legítimo gobernante, pero pidió un Gobierno tecnocrático para promover elecciones anticipadas y destacó como legítimas las decisiones del Parlamento ucraniano.

En tanto, ayer la jefa de la diplomacia de la Unión Europea (UE), Catherine Ashton, se reunió con el presidente interino y fue a Maidan, la plaza de la Independencia en la capital ucraniana, para depositar flores en memoria de las más de 80 víctimas de la violencia de la semana pasada.

Las nuevas autoridades abrieron una investigación criminal por "asesinato en masa de civiles" contra Yanukóvich y otros responsables de su Gobierno, ahora bajo orden de arresto.

Agencias AFP, DPA, EFE y ANSA

Dejá tu comentario