DNU: sesión especial amenaza con alterar el sopor legislativo

Graciela Camaño y Alfonso Prat Gay encabezaron el plenario de comisiones contra el DNU que crea el Fondo de Desendeudamiento. El Peronismo sin Patrón y la Coalición Cívica buscan despabilar al Congreso.

El proyecto de resolución que declara la nulidad del DNU 298/10 amenaza con alterar el sopor del Congreso. El franco de quince días que los diputados y senadores están dispuestos a tomarse con goce de sueldo hasta el 7 de abril podría verse interrumpido ante la iniciativa del Peronismo sin Patrón y de la Coalición Cívica para convocar a sesión especial el miércoles de la semana próxima, en la víspera de la Semana Santa.

La peronista anti-K Graciela Camaño y el cívico Adrián Pérez intentarán convencer hoy a sus colegas de bancas durante el plenario de comisiones que recibirá al ministro de Economía, Amado Boudou, que no existen razones para no sesionar la semana próxima tras la firma del proyecto de resolución que anula el uso de reservas del Banco Central para pagar deuda.

Camaño, presidenta de la Comisión de Asuntos Constitucionales, exploró el llamado a sesión especial en el plenario del martes pasado que comandó junto al titular de la Comisión de Finanzas, el cívico Alfonso Prat Gay. El dictamen de Diputados tendrá el miércoles de la semana próxima estado parlamentario al haber transcurrido siete días desde la firma del despacho, por lo que técnicamente la oposición estará en condiciones de aprobar con mayoría simple el proyecto de resolución contra el uso de reservas. Camaño y la Coalición Cívica de Elisa Carrió apuntan así a mostrarse como la contracara del Senado que desde el inicio del período ordinario de sesiones del 1 de marzo todavía no logró reunir quórum. El gesto no es inocente y gravita en la guerra íntima de la blonda diputada con Julio Cobos, presidente de la Cámara alta y protagonista de una trifulca judicial por la composición de la Comisión Bicameral de DNU. Mientras el Senado no sesiona, el mensaje del tándem Camaño-Carrió consiste en exhibir una Cámara baja hiperactiva, con trabajo en las comisiones, firma de dictámenes y hasta una sesión que terminó anulando a las 4 de la madrugada del jueves pasado el ya derogado DNU 2.010/09 que creaba el Fondo del Bicentenario.

Ayer, desde la Coalición Cívica explicaron que una sesión especial es la única posibilidad para sesionar la próxima semana. Es que el titular de la Cámara de Diputados, el kirchnerista Eduardo Fellner, ya aclaró que el oficialismo no concederá una sesión ordinaria para que un proyecto de resolución deje sin efecto un decreto de necesidad y urgencia de Cristina de Kirchner con rango de ley.

Intento opositor

Esta tarde, cuando Boudou desembarque en el Anexo de la Cámara de Diputados, los diputados opositores intentarán recolectar diez firmas para forzar la sesión especial. El principal obstáculo será comprometer a los legisladores que regresan a sus provincias para tomarse vacaciones pagas hasta el 7 de abril y que refunfuñan ante el dilema de viajar hasta la Capital Federal para trabajar o quedarse relajados en sus distritos.

Para garantizar el quórum de 129 diputados en el recinto, el centroizquierda será tentado con incluir en la orden del día el tratamiento de un proyecto de Claudio Lozano (Proyecto Sur) por el que se le solicita al Poder Ejecutivo que envíe al Parlamento una rectificación del Presupuesto 2010, acorde con el sobreviniente uso de u$s 6.000 millones de reservas contemplados en el DNU 298/10 sobre el Fondo de Desendeudamiento.

La doctrina kirchnerista sobre la superior jerarquía de un DNU frente a un proyecto de resolución fue expuesta por el diputado y apoderado del PJ Jorge Landau: «No es correcto tratar en esta comisión ese decreto hasta tanto no se expida la Bicameral de Trámite Legislativo, que aún está dentro de los diez días que deben transcurrir desde el ingresado del DNU al Congreso».