14 de marzo 2013 - 00:00

GIRO HISTÓRICO EN EL VATICANO: EL NUEVO PAPA ES EL ARGENTINO BERGOGLIO, AHORA FRANCISCO I

La Catedral Metropolitana fue ayer escenario de una misa en la que quedó expuesta la inmensa alegría de los fieles católicos por el nombramiento de Jorge Bergoglio, de ahora en más Francisco I, como nuevo papa. Lo espera un Vaticano en crisis.
La Catedral Metropolitana fue ayer escenario de una misa en la que quedó expuesta la inmensa alegría de los fieles católicos por el nombramiento de Jorge Bergoglio, de ahora en más Francisco I, como nuevo papa. Lo espera un Vaticano en crisis.
Se quebró una histórica tradición ayer en el Vaticano: la Iglesia Católica eligió al primer papa de América, el argentino Jorge Bergoglio. El anuncio, sorprendente con respecto a las especulaciones previas al cónclave, tuvo un altísimo impacto mundial, y los especialistas recordaron los enormes desafíos que tendrá por delante Francisco I, tal el nombre que adoptó. Con 1.200 millones de fieles en todo el planeta, que el 40% de ellos se encuentre en América Latina fue un elemento sustancial en el giro del Vaticano. «Pareciera que mis hermanos cardenales se fueron casi hasta el fin del mundo para elegir al nuevo papa» dijo, descontracturado, en sus primeras palabras a los 100.000 creyentes que colmaron la plaza San Pedro. Pero la realidad es que Bergoglio cuenta con atributos salientes que justifican su designación. Podría decirse que es un papa más cercano a la gente, -frecuente viajero en tren y en colectivo- y menos especializado en los estudios teológicos, lo que marca un fuerte contrapunto con el perfil de su antecesor, Joseph Ratzinger. Tiene además otro activo, que es su carisma. En ese sentido, se asemeja más a Juan Pablo II que a Benedicto XVI. Francisco I tendrá por delante retos importantes, como el escándalo del Banco del Vaticano, las feroces internas en la Curia, las denuncias de corrupción y los escándalos por el encubrimiento de los abusos de menores, todo ventilado en el llamado caso VatiLeaks, que incluyó el robo y difusión de documentos de Benedicto XVI. En una de sus homilías más recientes, Bergoglio se mostró proclive a una Iglesia de «puertas abiertas», esbozando así su inclinación a favor de reformas que reposicionen al catolicismo. Es el primer papa jesuita, lo que es otro reflejo de los cambios que se vienen en el Vaticano. Entre Bergoglio y el kirchnerismo hubo frecuentes enfrentamientos, que alcanzaban su punto máximo con los tedeum, en las celebraciones por la Independencia. Mantuvo asimismo posiciones esperablemente adversas a proyectos como el matrimonio igualitario y la ley de identidad de género. Aún así, el ahora papa tuvo palabras de elogio al morir Néstor Kirchner. Cristina de Kirchner viajará el domingo para su asunción el martes próximo y ayer envió una carta de felicitación por la designación. ¿Servirá este histórico nombramiento para poner una dosis importante de concordia en la Argentina, donde los enfrentamientos entre partidos políticos, gremios, gobiernos (Nación, provincias y municipios) y referentes son frecuentes y en preocupante ascenso?. (Ver págs. 2 a 10.)

Dejá tu comentario