“Las grandes firmas pasan por una crisis de innovación”

El ex Monsanto y Syngenta encabeza una nueva compañía que acaba de desembarcar en el país y ofrece tecnologías y planes de negocios novedosos.

Un nuevo comienzo. El ejecutivo sostiene que de la mano de los productos biológicos “se viene la tercer revolución agrícola”.

Carlos Becco es un personaje destacado de los agronegocios locales, con 30 años de trayectoria en el sector, fue parte de los equipos de trabajo de dos de las multinacionales más fuertes del mercado: Monsanto y Syngenta. Este año dio el batazo y pasó a dirigir la oficina local de Índigo, una startup dedicada al desarrollo de tecnología agrícola, más precisamente de bioestimulantes y aquí es donde Becco sitúa el futuro del sector y afirma que de la mano de los microbiomas se viene la tercer revolución del agro. A continuación un pantallazo de este emprendimiento que busca romper varios moldes.

Periodista: ¿Cómo llegó el ofrecimiento para sumarse a Índigo?

Carlos Becco: En lo personal venía prestando atención a como se encontraba el mercado, lo cierto es que hoy estamos ante una crisis de innovación por parte de las grandes firmas del sector, que hoy son muchas menos que años atrás producto de fusiones y adquisiciones y hasta reducciones. Vivimos el boom de los eventos biotecnológicos y de las moléculas pero por distintos motivos se frenó. Así es que mi rol dentro de estas organizaciones no era atractivo y a la par veía el gran potencial de los productos biológicos. Como último factor en los últimos meses grandes líderes a nivel internacional abandonaron Syngenta para sumarse al equipo de Índigo y así fue que cuando llegó el ofrecimiento lo estaba esperando y sólo quedó tomar la decisión. De alguna manera salí de una estructura muy grande, de mi zona de confort y cada día que pasa estoy convencido que tomé una buena decisión.

P.: ¿Porqué esta compañía elige como primer destino fuera de Estados Unidos a la Argentina?

CB.: Índigo está desembarcando en muchos lugares al mismo tiempo y busca expandirse globalmente, lo cierto que respecto a la Argentina mucho tuvo que ver los Recursos Humanos y a la par también es justo reconocer que los proceso regulatorios y autorizaciones para lanzar nuevos productos son mucho más eficiente y menos burocráticas, en por ejemplo, Brasil donde también la empresa está desembarcando. Además, el rol de los productores locales ávidos de incorporar tecnología es fundamental ya que hoy están realizando prácticamente un acto de fe.

P.: ¿Qué es Índigo y qué es lo que promete a los productores para que se animen a probarlo?

CB.: Ante todo quiero remarcar que es una tecnología nueva en el mercado, que no competimos con ninguna firma y venimos a agregar un valor a la producción agrícola. Ahora bien nuestro foco son los micro organismos, este año lanzamos un producto para soja y otro para maíz y en una primera instancia tenemos previsto arrancar en unas 10.000 hectáreas. El producto, en esta primera generación, tiene la particularidad de ayudar a mantener activa la soja en condiciones que hay estrés por alta temperatura o estrés hídrico. Este es sólo el inicio porque hay otros 15 nuevos productos viniendo en breve y los cuales ya se están probando en Estados Unidos y pronto en Argentina y Brasil.

P.: ¿Producen en planta propia y cómo será el canal de comercialización para hacer llegar este producto a los agricultores locales?

CB.: Somos una empresa millennial, así que nuestro foco primordial es la investigación y desarrollo junto a los lazos comerciales, entonces, en este inicio estamos tercerizando la producción y nuestra energía está en conseguir clientes. También es muy novedoso como llegaremos a los campos porque realizamos acuerdos con grandes productores y a ellos le entregaremos la semilla ya tratada con este producto que se activa con la germinación. No vendemos el producto solo sino todo un paquete de tecnología. Contamos con un portfolio de distintas variedades de semillas a las que le incorporamos nuestra tecnología y para esto cerramos acuerdos comerciales con empresas semilleras de punta y además el agricultor podrá seguir de cerca el desarrollo del cultivo porque también ofrecemos el servicio que provee la compañía Solapa 4 con imágenes satelitales, entre otras cosas.

P.: Ahora vamos a desasnar al productor que está leyendo esta entrevista y quizás se vio tentado con la propuesta ¿Cuál es el valor comercial de los productos de Índigo?

CB.: Esto también es muy novedoso, como todo lo que propone Índigo, y en realidad es imposible establecer una valor comercial porque estamos ofreciendo un valor agregado para el negocio agrícola. Entendemos además que las firmas de insumos tradicionales venden simplemente un producto y no acompañan en el riesgo al agricultor, nosotros venimos a cambiar esa historia. Básicamente vamos a proveer toda esta tecnología en la semilla y con una serie de acuerdos recibiremos el retorno a porcentaje de cosecha, es decir que si el productor sufre una catástrofe climática en la que pierde todo a nosotros no nos tiene que pagar por la tecnología.

P.: ¿Cuál es la inversión inicial para esta campaña y cuáles son las perspectivas para el mediano plazo?

CB.: Sólo para este ciclo la inversión es de u$s5 millones que están dirigidos a fortalecer la red comercial. Increíblemente nuestro equipo en la Argentina en este inicio es de seis personas pero proyectamos en tres años tener 100 empleados directos y 500 indirectos. Esa es nuestra intención y tengo confianza plena que cuando se conozca la tecnología que ofrecemos vamos a crecer sin pausa.

Entrevista de Yanina Otero