Presupuesto se garantiza quórum gracias a la UCR

• Gobierno araña aprobación en general y prepara veto parcial

Cristina de Kirchner

El oficialismo sorteó ayer el primer obstáculo en la carrera por aprobar el Presupuesto 2011 y se garantizó quórum para el debate de mañana en la Cámara de Diputados. Desde la UCR, el vicepresidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, Miguel Guibergia, confirmó telefónicamente a este diario que el radicalismo bajará al recinto aunque esa decisión le permita al kirchnerismo conseguir la aprobación en general de esquema de gastos e ingresos del año próximo.

No se trata de un rapto de altruismo de la UCR. Los bloques de centroizquierda, tradicionales aliados de la Casa Rosada en el Congreso, ya habían anticipado que estaban dispuestos a dar quórum y habilitar el debate, aunque Proyecto Sur de Claudio Lozano y Fernando Pino Solanas tiene firmado, al igual que los radicales, su propio dictamen. El radical Guibergia aportó además otro argumento: «Si no damos quórum y no se aprueba el Presupuesto 2011 siguen gobernando con el del año pasado, sin control del gasto y con superpoderes. Vamos a intentar lograr algún consenso, pero hay puntos que no vamos a negociar».

Estrategia

La dupla santafesina conformada por el jefe de los diputados kirchneristas, Agustín Rossi, y el presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, Gustavo Marconato, se encerraron ayer en el Ministerio de Economía junto a Amado Boudou, el secretario de Hacienda, Juan Carlos Pezoa, y el secretario de Finanzas, Hernán Lorenzino, para ultimar la estrategia parlamentaria y analizar algunos retoques que podrían captar voto de Proyecto Sur, bloque que reclama destinar el uso de reservas sólo a proyectos de infraestructura para 2011, un reclamo que suena como música sinfónica en pleno año electoral.

Despejada la incertidumbre en torno al quórum, en este nuevo escenario el Frente para la Victoria podría garantizarse la aprobación en general del Presupuesto 2011. Para cualquier contratiempo o cambios introducidos por la oposición para la votación en general, existe el veto parcial de Cristina de Kirchner. Anoche, la cúpula de la bancada kirchnerista le aseguraba a la Presidente un piso de 123 votos en general a favor del proyecto, con el apoyo de siete legisladores del Frente Cívico de Santiago del Estero, cinco de Nuevo Encuentro de Martín Sabbatella, otra media docena del SI de Eduardo Macaluse y La Concertación de Hugo Prieto, algunos votos del socialismo -que daría libertad de acción- y otros partidos provinciales cuyos gobernadores dependen en gran medida de las partidas presupuestarias que les gira el Tesoro Nacional para subsistir políticamente.

Más allá de la discusión por la subestimación del gasto y de la inflación, la divisoria de aguas entre el dictamen de mayoría kirchnerista y el dictamen de la UCR, la Coalición Cívica y el Peronismo Federal pasa por el uso o no de las reservas del Banco Central. El Gobierno envió un proyecto que autoriza su uso para el pago de deuda mientras que los bloques antikirchneristas insisten con mantener la intangibilidad de esos recursos de la máxima autoridad monetaria. Además, la oposición asignó partidas específicas para llevar las jubilaciones al 82% móvil del salario mínimo, a pesar de que Cristina de Kirchner ya vetó la ley que había sancionado el Congreso en ese sentido.

Objetivo

Así, la estrategia del bloque del Frente para la Victoria en la Cámara de Diputados apuntará a aprobar en general mañana el proyecto de Presupuesto 2011, que contempla un crecimiento del 4,3 por ciento, una inflación del 8,9 por ciento y una previsión de dólar de 4,10 pesos promedio. Y resistir la votación en particular con el reaseguro de un veto parcial del Poder Ejecutivo que elimine cualquier tipo de modificación que pudiera introducir la oposición.

Como las sesiones ordinarias finalizan el próximo 30, en la Casa Rosada ya se prepara el decreto de convocatoria a sesiones extraordinarias para darle tiempo al Senado a aprobar el proyecto de Presupuesto que tendría un trámite de al menos dos semanas en comisión.