8 de junio 2007 - 00:00

El drama griego de los Dalmasso

Descartados los sospechosos de siempre (dirigentes y funcionarios políticos), el crimen de Nora Dalmasso dio ayer un vuelco a lo conmocionante cuando el fiscal Javier de Santo imputó al hijo de la mujer asesinada en Río Cuarto, Facundo Macarrón, en una causa por presunto abuso sexual seguido de muerte. Las sospechas son aún «leves», y el joven continuará en libertad. Ni los griegos, tan entrenados en tragedias, habían vivido algo como lo que presume De Santo: Edipo sólo se atrevió a una parte, pero dejó con vida a Yocasta; Electra hizo que su hermano Orestes vengara la muerte del padre Agamenón, pero nada más. Habría que ir a la Roma clásica para encontrar un símil: Agripina inició a su adolescente hijo Nerón en los placeres de la carne, y mucho después, cuando ella se tornó una enemiga para su gobierno, Nerón mandó a matarla. En las hipótesis del fiscal existen, además, elementos unidos a otros móviles pasionales que involucran a la homosexualidad del joven acusado, tal vez no admitida por «Norita». En definitiva: por ahora, el único que tiene las cosas claras en Río Cuarto y volvió a respirar en paz es el pintor de paredes Gastón Zárate -lo señalaron, fue preso, salió-, por completo ajeno a Eurípides y a Sófocles.

El drama griego de los Dalmasso
Facundo Macarrón, el hijo de Nora Dalmasso, fue imputado ayer del abuso sexual y asesinato de su madre luego de que se levantara el secreto de sumario. Sin embargo, quedará en libertad, debido a que el fiscal Javier Di Santo entendió que las sospechas son «leves».

A pesar de los cargos, la defensa del joven de 19 años se mostró satisfecha porque, según ellos, los elementos de la acusación son « endebles».

El representante legal del joven, Benjamín Sonzini Astudillo, aclaró que el fiscal lo imputó por «sospechas leves», figura que está contemplada en el artículo 306 del Código Procesal Penal de la provincia de Córdoba y que le permite al acusado continuar en libertad mientras sigue la investigación del homicidio.

  • Puntos oscuros

  • Lo que empezó a cambiar el rumbo de la investigación fue la declaración de un joven, quien sería la pareja de Facundo, que no pudo corroborar los horarios declarados el 10 de enero último por el hijo de Nora. «Andy» Peralta no sabe «con exactitud» lo que ocurrió entre las primeras horas del 25 de noviembre pasado y la tarde de esa trágica jornada, aseguraron los investigadores. A raíz de eso, las autoridades comenzaron a dudar sobre los puntos oscuros de ambas declaraciones, que hicieron dar un giro en la investigación y terminaron con la imputación al joven.

    En Córdoba en estos momentos se está tratando de determinar si la muerte de Dalmasso fue el producto de una pelea familiar entre Facundo, «Andy» -su pareja- y su madre, quien aparentemente no estaría a favor de la relación de su hijo con éste.

    Cabe recordar que la misma figura por la que se acusa a Macarrón se le aplicó en su momento al ex asesor letrado del Ministerio de Seguridad cordobés, Rafael Magnasco, quien fue el primer imputado del caso y que ya está desvinculado del mismo. Magnasco se había presentado ante el fiscal a los pocos días de ocurrido el crimen. En esa ocasión pidió que le sacaran sangre para una prueba de ADN.

    «El ADN pertenece al patrón genético de la familia Macarrón y se halló en 13 rastros, la mayoría epiteliales, levantados del cuerpo; en el lazo con el que la mujer fue estrangulada, en las sábanas y otros lugares de la escena del crimen», explicó Astudillo, quien dijo que el fiscal tuvo en cuenta esos elementos a la hora de acusar a Facundo Macarrón.

    Además, Astudillo entiende que la resolución del fiscal es «un paso adelante», ya que Facundo queda libre pero a disposición de la Justicia y así va a poder «demostrar su inocencia». Es que para el abogado «está acabadamente comprobado» que Facundo la noche del crimen estuvo en la ciudad de Córdoba, donde reside y estudia la carrera de Abogacía.

    La prueba genética se logró debido a que el abuelo de Facundo, Félix Macarrón, se extrajo sangre para descartar una contaminación de la escena del crimen, ya que junto a otras 22 personas, entre ellas el fiscal y un cura, estuvieron donde se encontró el cadáver. Sin embargo, ese perfil recuperado no es concluyente, ya que se estableció su rama paterna pero ahora deberá comprobarse si es el de Facundo, para lo que el joven tendrá que someterse a una prueba de ADN, señaló Astudillo, que ya anunció que dejará de ser querellante para convertirse en el defensor del ahora imputado.

  • Coartada

    El letrado asegura que Macarrón primero participó de una reunión del Rotary Club hasta la 1:00, luego se fue a cenar con otras personas a un restorán cercano a su departamento, donde estuvo hasta cerca de las 3:00, y finalmente se fue a dormir.

    Por su parte, Enrique Zabala, abogado del pintor Gastón Zárate, quien fue detenido hace unos meses porque los investigadores sospecharon de su participación en el caso, aseguró que va a pedir el sobreseimiento de su defendido. «Con esta resolución es obvio que Zárate no tiene nada que ver», señaló el letrado, que opinó que el criterio de la fiscalía es «insólito», ya que a su cliente «lo detuvieron sin haber obtenido un perfil genético».

    Además, Zabala cuestionó la decisión del fiscal de dejar en libertad a Macarrón. «Esto no tiene sentido. Tiene que haber una detención. Si con un perfil genético hay imputaciones leves, no sé cómo se va a hacer para decretar una prisión preventiva o elevar la causa a juicio oral. Van a necesitar una filmación del autor en el hecho.»
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