5 de julio 2006 - 00:00

Crisis en Uruguay: Vázquez debió avalar al jefe del Ejército

El coronel Gilberto Vázquez desató una crisisen el Ejército uruguayo tras su huida del HospitalMilitar, donde permanecía bajo arresto.
El coronel Gilberto Vázquez desató una crisis en el Ejército uruguayo tras su huida del Hospital Militar, donde permanecía bajo arresto.
Montevideo (AFP, EFE) - El presidente uruguayo, Tabaré Vázquez, debió ratificar ayer en su cargo al comandante del Ejército, general Carlos Díaz, luego de la crisis desatada por la fuga el lunes de un militar requerido por la Justicia argentina por violaciones a los derechos humanos.

«El presidente no aceptó su dimisión y le garantizó su absoluto respaldo en todas las acciones que entienda pertinentes, tanto al comandante en jefe, como a la ministra de Defensa», Azucena Berrutti, subrayó una fuente de la Presidencia. Con todo, observadores no descartaban que la salida del jefe militar se produzca hoy, cuando el presidente Vázquez regrese de su viaje a Venezuela.

El apoyo del mandatario surgió una vez que el general Díaz puso su cargo a disposición del presidente, tras la fuga de dependencias militares del coronel Gilberto Vázquez, de quien oficiaba como garante de la detención.

Gilberto Vázquez cumplía arresto preventivo desde el pasado 6 de mayo, a la espera de una resolución judicial por los cargos de « asociación ilícita» y «privación de libertad», al igual que los uniformados José Nino Gavazzo, Jorge Silveira, Ernesto Rama, Ricardo Medina y José Ricardo Arab.

El coronel está acusado de haber participado en 1976 en la desaparición de María Claudia García de Gelman, nuera del poeta Juan Gelman, y se fugó del Hospital Militar de Montevideo, donde estaba internado por una dolencia en la próstata.

  • Manos libres

    Sobre todos los acusados recae un exhorto de extradición librado por el juez federal argentino Guillermo Montenegro, por su presunta participación en el Plan Cóndor, que coordinó la represión entre las dictaduras de los años 70 en el Cono Sur.

    Mientras algunas versiones de prensa dan cuenta que el jefe del Ejército se aprestaba a presentar su renuncia, el encargado de relaciones públicas del comando, coronel Roberto Molina, indicó que «por el momento sólo ha puesto su cargo a disposición para dejarle las manos libres al Poder Ejecutivo».

    En filas castrenses, la huida del coronel Vázquez se interpreta como una «traición», ya que Díaz era el máximo responsable por su comportamiento, no sólo por su cargo sino por el hecho de que él fue quien se hizo cargo del mantenimiento de los acusados en dependencias militares en lugar de un centro penitenciario regular.

    Tras la fuga, el gobierno uruguayo dispuso el inmediato cierre de fronteras, así como la orden de captura nacional e internacional a través de Interpol.

    Por su parte, el Canal 12 de la televisión local afirmó haber recibido una llamada telefónica de Gilberto Vázquez indicando que se encontraba en Brasil, versión que aún no ha sido confirmada por las autoridades.

    Mientras tanto, el resto de los detenidos fue trasladado ayer a centros penitenciarios más vigilados.

    María Claudia García fue detenida el 24 de agosto de 1976 en Buenos Aires junto con su esposo, Marcelo Gelman, cuyo cadáver apareció después. La mujer estaba embarazada de siete meses cuando fue trasladada a Montevideo desde el centro de detención clandestino Automotores Orletti de Buenos Aires.

    En el Hospital Militar de Montevideo, María Claudia dio a luz a una hija y luego desapareció. La niña fue adoptada por un matrimonio uruguayo y fue hallada tras una investigación que realizó su abuelo y que fue apoyada por el entonces presidente de Uruguay, Jorge Batlle, a fines de marzo de 2000.
  • Dejá tu comentario

    Te puede interesar