En el comienzo del año electoral, hasta el Carnaval de Gualeguaychú terminó politizado. La comparsa del club Juventud Unida sorprendió con marionetas gigantes de los ex presidentes Néstor Kirchner, Carlos Menem, Fernando de la Rúa y del ex dictador Jorge Videla, que simulaban ser controladas por un muñeco que representaba a George W. Bush. La carnavalesca puesta en escena espantó del corsódromo al intendente local, Juan José Bahillo; al senador nacional Guillermo Guastavino, y al intendente de Colón, Hugo Marsó. Todos sospecharon que la burla había sido ideada por el diputado del PJ díscolo, Emilio Martínez Garbino, ya que sus hijos Jorge y Jaime integran la comisión directiva de Juventud Unida.
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