Los Angeles - La guerra en Irak ha inducido más a la prudencia que a la oposición ruidosa en aquellas figuras del espectáculo que se declararon antibélicas. A casi dos semanas de iniciada, esta es una de las características más notorias de los efectos de la segunda guerra del Golfo en el show business.
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La otra es que el público, lejos de dejar de frecuentar los espectáculos, va más a ellos y sobre todo a los abiertamente escapistas. Por el contrario, películas de tono bélico (ya sea pro o contra) no son las favoritas, como ocurrió con el decepcionante resultado del estreno del último film con John Travolta, «Basic», ampliamente superado por la comedia de humor «Jefe de Estado» con Chris Rock.
En cuanto a la prudencia, la nueva estrella en sumarse a la lista de quienes optaron por un momento más oportuno para hacer públicas sus posiciones es Madonna. Su último video, que venía anunciándose con gran publicidad, contenía imágenes de soldados travestidos, niños iraquíes sobre un fondo de bomba nuclear y el lanzamiento de una granada a un doble de George W. Bush. La estrella había dicho, hasta el lunes, que nada la haría retractarse de estrenarlo, pero ayer lo pensó mejor.
La filmación, en la que también se veían aviones bombarderos furtivos y lanzaderas de misiles, en medio de destellos de la bandera de EE.UU. mientras la cantante orina en un retrete, será archivada en las sombras por el momento. En una declaración pública, Madonna dijo que el video «fue filmado antes de la guerra. No creo que sea apropiado emitirlo en este momento debido a la situación volátil del mundo y en respeto a las fuerzas armadas, a las que apoyo y por las que rezo. No quiero correr el riesgo de ofender a alguien que malinterprete el sentido del video». El trabajo corresponde a la primera canción del próximo CD de la artista, que aparecerá el 22 de abril.
Por su parte la Disney (como se sabe, una empresa bastante más conservadora que Madonna) tomó ayer una decisión exagerada, pero que demuestra lo susceptible que es hoy el mundo de las imágenes y sus significados. La empresa ordenó modificar el diseño del afiche de su última comedia para adolescentes, «What a Girl Wants», protagonizada por Amanda Bynes, simplemente porque la joven actriz aparecía en él haciendo el símbolo de la paz entre dos guardas británicos del Palacio de Buckingham.
En un comunicado oficial, la Disney dijo que «se trata de una película para jóvenes sin absolutamente ninguna relación con la guerra o la política, pero el diseño de su afiche puede ser malinterpretado. Es la historia de una adolescente que viaja a Londres para tratar de reencontrarse con su padre y no existe ninguna alusión a los hechos mundiales que se están viviendo hoy». El afiche en cuestión inundaba las principales ciudades de los EE.UU., y ayer se estaba cambiando a toda velocidad. Barbra Streisand, otra de las figuras cuyo silencio durante la reciente ceremonia de los Oscar resultó llamativo, dio su explicación poco después. «Lo hice por respeto a los productores del Oscar, que no se merecen que alguien se valga de su esfuerzo para usarlo como tribuna. La actriz prefirió, en cambio, enviar por escrito a la publicación especializada «Daily Variety» la declaración que no hizo en el Kodak Theater: «Me parece trágico que la administración Bush haya fracasado tan miserablemente en la diplomacia y tengamos que encontrarnos ahora en medio de una guerra que hubiera sido evitable.Y me parece vergonzoso que los medios consideren 'antipatrióticos' a la gente que se atreve a manifestarse en contra de la guerra. La libertad de expresión es un acto patriótico. Esto lo vengo sosteniendo desde siempre. Y he dicho que los artistas tenemos, por nuestra visibilidad, más responsabilidad que el resto de los ciudadanos para decir algunas cosas, pero igualdad de derechos para hacerlo».
En los últimos días, el actor Martin Sheen eligió otra silenciosa forma de protesta. El protagonista de «Apocalypse Now», cuya imagen publicitaria en una tarjeta de crédito fue rápidamente retirada de circulación por la agencia que lo había contratado, encabezó una protesta en esta ciudad con la boca tapada por una cinta adhesiva, en donde estaba escrita la palabra «Paz».
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